La feria de San Andrés, que se celebra hoy, es una de las citas festivas más importante de Eibar. Este año, la organización se ha visto obligada a cambiar de ubicación, ya que el viernes el viento provocó daños considerables en las carpas instaladas para la feria en Txaltxa Zelai, el escenario habitual. La Escuela de Armería y el colegio La Salle-Isasi han accedido a ceder sus patios para poder instalar la feria.

El Ayuntamiento informó ayer de que «el fuerte viento racheado ocasionó la caída de la práctica totalidad de las carpas, además de arrastrar con ellas varias farolas y papeleras». El alcalde, Miguel de los Toyos (PSE), celebró que no se produjeran mayores incidentes, ya que no había circulación en el momento en que esas instalaciones se vinieron abajo.

La feria, que abre sus puertas a las 9.30, contará con 82 puestos, en los que se ofrecerán productos como verduras, miel, queso, pan y fruta. La muestra de ganado sí se mantiene en su ubicación habitual, en Untzaga.