Aparece acuchillado un joven en Galdakao, y un hombre fallece al caer su coche al río en Erandio
GARA |
Un joven de 28 años apareció muerto el lunes por la noche en la puerta de un chalet en Galdakao. El suceso tuvo lugar en el barrio Txistulanda de esta localidad vizcaina, concretamente en el portal número 29. El cuerpo sin vida del joven, que responde a las iniciales A. N., presentaba varias cuchilladas, y junto a su mano derecha se halló un arma blanca.
El Ayuntamiento de Galdakao informó de que el joven residía en Barakaldo y que procedía de Camerún. Asimismo, explicó que la Policía Municipal halló su cuerpo tendido en la acera sobre las 22.40 del lunes, cuando los agentes acudieron al lugar en respuesta a los gritos de socorro que profería una mujer, vecina del barrio. Una ambulancia se trasladó hasta el lugar y certificó la muerte del joven. La Ertzaintza se ha hecho cargo de la investigación del caso.
Txistulanda es un barrio situado en las faldas del monte Ganguren, y está formado por chalets adosados. Se halla lejos del centro urbano de Galdakao. Desde la agrupación que reúne a los vecinos del barrio, y a los del cercano Aperribai, indicaron que «el suceso ha conmocionado al tranquilo barrio», y que muchos de ellos se enteraron de lo sucedido por los medios de comunicación, ya que «a esa hora, y con el frío que hacía, las calles estarían desiertas», aseguraron. Indicaron que se hallaban asustados por lo sucedido.
Con su vehículo al río
Por otro lado, agentes de la Ertzaintza y el Cuerpo de Bomberos rescataron ayer por la mañana el cadáver de un hombre de 49 años de edad, después de detectar un vehículo sumergido en la ría en la zona de Arriaga-Sakoni, en Erandio.
El hombre, vecino de Santurtzi, fue hallado en el interior del vehículo sumergido, un Opel Zafira, y el rescate tuvo lugar sobre las 11.20. Por la tarde la Ertzaintza informó de que, al parecer, cayó al río por accidente, al salirse de la calzada el vehículo que conducía. Los buzos que se sumergieron en la ría rastrearon la zona para cerciorarse de que no existían más víctimas bajo las aguas.
La familia del fallecido, JL. LL. R., que denunció su desaparición por la tarde, fue avisada de lo ocurrido. La Ertzaintza recibió la llamada de un particular sobre las 11.00, que avisó de la existencia de un vehículo sumergido en el río Asua a la altura del citado barrio. A la mañana dieron a conocer el hallazgo de indicios que pudieran esclarecer los hechos, pero no fue hasta por la tarde cuando certificaron que se había tratado de un accidente de circulación.