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Anuncio de la fecha de las elecciones

Ibarretxe anuncia que las elecciones serán el 1 de marzo

Con un mes y medio de adelanto sobre el término de la legislatura, finalmente las elecciones al Parlamento de Gasteiz serán el 1 de marzo -el mismo día que los comicios gallegos-, según hizo público ayer el lehendakari, Juan José Ibarretxe. Abierta ya oficialmente la carrera electoral con este anuncio, el 2 de febrero se conocerán las diferentes candidaturas y la campaña levantará el telón el 13 de febrero.

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GARA | GASTEIZ

Era una de las fechas que barajaban algunos analistas -otros, en cambio, apuntaban a mediados de ese mismo mes-, por coincidir con los comicios gallegos, y al final así ha sido. El lehendakari, Juan José Ibarretxe, convocó ayer las elecciones al Parlamento de Gasteiz para el 1 de marzo, un anuncio que llega a apenas seis días del inicio de su juicio en el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) por reunirse con integrantes de Batasuna; una coincidencia que algunos observan cuestionable.

Tras la convocatoria de estos comicios, el lehendakari firmará este próximo lunes el decreto de convocatoria y disolución del Parlamento, que será publicado el 6 de enero en el Boletín Oficial del País Vasco.

Una vez cumplidos estos trámites iniciales, el calendario de las fechas clave para este proceso electoral arrancarán el 2 de febrero, cuando se proclamarán las candidaturas; entre el 13 y el 27 de febrero se desarrollará la campaña; el citado 1 de marzo se celebrarán las elecciones y el 11 del mismo mes se celebrará la proclamación de resultados.

«Trasladé durante todo el año 2008 que nadie se pusiera nervioso, que las elecciones se iban a celebrar en marzo y las elecciones se celebrarán en marzo», se justificó el líder jelkide, después del Consejo de Gobierno extraordinario de ayer, para rechazar cualquier margen de sorpresa en su convocatoria.

Ibarretxe aprovechó el esperado anuncio para mostrar su «agradecimiento especial» a las tres formaciones del tripartito. «He sentido muy de cerca el calor, el cariño y el apoyo que me han dispensado en estos últimos cuatro años, y no es poco en esta vida tener el calor, el ánimo y el cariño de las personas y de los partidos políticos con los que estas trabajando», agradeció quien ha sido designado por cuarta vez por su partido como candidato a Ajuria Enea.

Preguntado acerca de si éstas palabras presagiaban una despedida de esta fórmula de Gobierno, el lehendakari aseguró que se trata de «una despedida de legislatura» y se apresuró a precisar que «vamos a oír a la sociedad antes de hacer planteamientos de futuro».

El propio Ibarretxe emplazó a las fuerzas políticas a que la campaña en ciernes sea «limpia y en la que cada cual traslade sus argumentos a la ciudadanía, con limpieza y claridad, evitando, en la medida de lo posible, los insultos y las descalificaciones que tan flaco favor hacen a la clase política y que, de alguna manera, explican por qué la ciudadanía algunas veces está tan lejos de los responsables políticos». Ésas fueron sus inquietudes; sobre la posibilidad o no de participación en las urnas de todo el abanico político vasco, ni una palabra.

Importantes leyes en el tintero

La Cámara de Gasteiz cierra, así, un nuevo periodo legislativo, en este caso antes de tiempo. Durante estos últimos casi cuatro años ha aprobado 48 leyes y de algunas se habló mucho, como la de la consulta; otras tuvieron impacto ciudadano, como las de servicios sociales y de la familia, pero también se han quedado otras relevantes pendientes, como la municipal, la de vivienda o la de modelos lingüísticos. El pasado día 29 dio luz verde a su última ley: la de presupuestos generales de la CAV para 2009.

Entre las 48 nuevas leyes o reformas de leyes aprobadas -una el 2005, diez el 2006, 17 el 2007 y otras veinte este año- están las cuatro de presupuestos, pactadas con el PSE, después de que la legislatura anterior el Gobierno tuviera que recurrir a la prórroga en tres ocasiones.

Otras leyes destacadas aprobadas en estos cuatro años han sido de carácter social, como la Ley de Servicios Sociales, de apoyo a las familias o de la garantía de ingresos y para la inclusión social. La que se aprobó y luego fue anulada por el Constitucional fue la más comentada: la ley que contemplaba celebrar una consulta popular el 25 de octubre.

En cambio, otras leyes importantes quedarán para otra ocasión, en varios casos no por culpa del Parlamento, sino por haber sido enviadas a última hora y no haber habido tiempo para su tramitación.

Así, la falta de acuerdo ha hecho que el Ejecutivo no haya ni siquiera presentado en el Parlamento la ley de modificación del sistema educativo vasco, con el que se pretendía poner fin a los actuales tres modelos lingüísticos.

En cualquier caso, el trabajo «con acierto y con errores», dijo ayer, Ibarretxe, está hecho, y consideró que, una vez «realizados y aprobados los presupuestos para 2009 y tomadas las medidas económicas, necesitamos dar respuestas ágiles desde la política al momento que vivimos». Por ese motivo, el dirigente peneuvista afirmó que «es bueno responder con agilidad y celebrar las elecciones sin pérdida de tiempo el primer domingo del mes de marzo».

Candidatos

Las elecciones del 1 de marzo serán para Ibarretxe los cuartos comicios a los que se presente como candidato a lehendakari, tras tomar el relevo, en 1998, del anterior lehendakari, José Antonio Ardanza.

Más veterano aún que Ibarretxe es el líder de EB, Javier Madrazo, que será candidato por nada menos que quinta vez consecutiva. También repetirá, por segunda vez por el PSE, Patxi López. Una de las novedades vendrá del PP: Antonio Basagoiti sustituye a María San Gil. La otra novedad será la ofertada por EA, que ha apostado por ir en solitario y su presidente, Unai Ziarreta, será su candidato.

 
El PSE ve «prisa y desesperación» en el seno del PNV

El anunció realizado ayer por Ibarretxe suscitó diversas valoraciones en el ámbito político, siendo el mensaje lanzado desde el PSE el más crítico con la fecha elegida. Pese a asegurar que está «preparado», apunta que la elección del día -que coincide con las elecciones en Galicia-, evidencia en el PNV una «gran prisa, consciente de que el tiempo corre en su contra». La formación de Patxi López afirmó, sin embargo, tener «mucha confianza en las nuevas mayorías que se configuran» en torno a su proyecto.

La formación jeltzale arropó a Ibarretxe en su convocatoria y alertó al PSE de que si no gana, «sumirá al PSE en una pequeña crisis que los obligará a la búsqueda de liderazgos».

Los partidos que junto al PNV conforman el tripartito, EA y EB, no mostraron sorpresa ante la noticia. La formación de Unai Ziarreta indicó que se presenta «con ánimo» y aseguró que se está «como país ante un nuevo reto: el del derecho a decidir»; «Hemos hecho nuestra apuesta y estamos convencidos de que vamos a tener un buen resultado», concluyó. EB por su parte, emplazó al PNV y al PSE a que «eviten caer en la tentación de promover el bipartidismo».

El PP se mostró satisfecho con la coincidencia, «eso al PP le viene muy bien porque dice lo mismo en Galicia y aquí, al PSOE no le va tan bien porque en Galicia dice una cosa y aquí otra», censuró.

 

Acortando los plazos para un viaje incierto

Iñaki IRIONDO

El lehendakari convocó ayer las elecciones autonómicas para el próximo 1 de marzo dando por cumplidos sus deberes, reducidos a estas alturas a la aprobación de los presupuestos (de la mano del PSOE) y al anuncio de medidas anti-crisis. A su entender, no hay motivo ya para extender más la legislatura y conviene que el nuevo parlamento esté constituido cuanto antes. De igual modo podía haber optado por apurar los plazos hasta abril, argumentando entonces que convenía seguir trabajando hasta el último momento y dar la posibilidad de que la Cámara debatiera, entre otras, la Ley de Vivienda o de que el propio Gobierno diera vía libre al proyecto de ley de perfiles lingüísticos con el que PNV y el Departamento de Educación de EA se han enredado en los últimos meses para acabar sin hacer nada, como siempre quisieron en Sabin Etxea y las sedes de PSE y PP.

Pero Juan José Ibarretxe, el que decía no estar pensando en elecciones, ha decidido finalmente acortar al máximo los plazos. Esa es una de las potestades del lehendakari y nadie podrá aducir sorpresa puesto que ya había adelantado que los comicios serían en marzo. Aun así, el ajustar de esta forma el calendario no es inane. Por un lado, el sector político que debe agudizar su ingenio para tratar de sortear las condiciones antidemocráticas actuales dispondrá de alguna semana menos para labores de ingeniería electoral creativa. Por otro, al hacer coincidir los comicios de la CAV con los de Galicia, Ibarretxe obliga a Zapatero a tener que dividirse para atender debidamente ambos frentes, y no hay que olvidar que el PNV considera que el verdadero reclamo electoral con el que se enfrenta es con el actual inquilino de la Moncloa y no con Patxi López, al que ahora desprecia como candidato y mañana cortejará como socio.

Arranca, pues, oficialmente la carrera para una nueva legislatura que se adivina distinta a cualquiera de los últimos diez años. Queda por ver si será un viaje al futuro o un regreso al pasado.

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