Rusia anunció ayer que demandará a Ucrania por robar el gas que pasa por su territorio, mientras que Kiev advirtió de que su conflicto con Moscú amenaza seriamente los suministros a Europa.

El presidente del consorcio ruso Gazprom, Alexei Miller, denunció que países como Hungría, Eslovaquia, Rumanía, Polonia, los estados bálticos y algunos balcánicos «ya registran sustracciones ilegales de gas en territorio de Ucrania». Gazprom decidió incrementar el bombeo de gas para compensar estas sustracciones.

El consorcio ucraniano, Naftogaz, negó, por su parte, que esté sustrayendo gas ruso y acusó a Gazprom de reducir los suministros a los países europeos y de «someter a Ucrania a un chantaje energético»