Encerrona en el Sánchez Pizjuán
Gazpacho calentito para iniciar la travesía por el Himalaya
El entorno sevillista se ha encargado de subir varios grados la temperatura ambiental de un partido en el que desde hace varias temporadas no hace falta mucho para que termine echando chispas.
Natxo MATXIN | IRUÑEA
Más que un «color especial», como decía la canción, Sevilla lo que tiene -y más concretamente el Sánchez Pizjuán- es un «calor especial» cuando Osasuna rinde visita. De un tiempo a esta parte los envites entre hispalenses y rojillos en el feudo andaluz vienen precedidos, de la mano de los de Nervión, por un ya repetitivo y peligroso incremento de la temperatura ambiental.
Y el choque de hoy no va a ser una excepción. Pese a que los navarros han tratado a lo largo de la semana de quitarle hierro, sobre todo a lo que ocurrió la pasada campaña, con Iturralde como desgraciado protagonista al señalar un penalti que no existió, desde el entorno sevillista se han empeñado en echar más leña al fuego.
De ahí que se vayan a encontrar con un gazpacho más que calentito para encarar la primera etapa del trekking por el Himalaya futbolístico de enero. Por si esto fuera poco, el que José Antonio Camacho sea el inquilino del banquillo rojillo no hace sino aportar más gasolina. El murciano no dejó muy buen recuerdo de su breve etapa -19 partidos- en el club hispalense y seguro que el recibimiento no va a ser precisamente amistoso.
Carril derecho de contención
Por todas esas razones, traerse los tres puntos del Sánchez Pizjuán no sólo aliviaría la peliaguda situación en la tabla, sino que tendría un sabor especial por tratarse del rival que es. Y aunque esa es la intención con la que se pretende saltar al terreno de juego, no es menos cierto que la previsible alineación tiene más visos de buscar la contención que la creación.
Un buen ejemplo de ello es la salida de la convocatoria de hombres ofensivos como Juanfran o Ezquerro, y el posible carril derecho que alineará el de Cieza, con Javier Flaño en el lateral y Azpilicueta en el carril, una fórmula que no dio muy buenos resultados en Huelva, pero que se vuelve a repetir para resistir los embates que se prevé acometa el Sevilla en su campo, donde sólo ha perdido dos encuentros de los ochos disputados hasta ahora.
Son muchos los puntos que se han escapado por una falta de atención en un momento dado, un fallo puntual o la pérdida de intensidad en el último tramo de algunos choques. Consciente y preocupado por ello, José Antonio Camacho exigió a los suyos «saber controlar el partido y que no se te vaya».
Será un factor esencial en un encuentro de mucha dificultad, ya que el Sevilla cuenta con futbolistas desequilibrantes -hasta el último momento no se podrá conocer si jugará Luis Fabiano, aquejado de un enfriamiento- ante los que habrá que estar muy atentos si no se quiere mandar al traste el trabajo de los noventa minutos. «Debemos ser un conjunto tan competitivo como ellos, el equipo ya es consciente de que sabe jugar al fútbol y no tengo ninguna duda de que vamos a apretar e ir a buscarles», explicó el técnico rojillo.
En cuanto a los posibles cambios -cuatro en la convocatoria y otros tantos probables con respecto al Getafe-, el murciano aclaró que no se trata de rotaciones ante el compromiso copero de entre semana, sino que «tenemos que buscar un once muy competitivo».
N.M.
El torneo interescolar organizado por Osasuna discurre hoy con la celebración de las semifinales. Así, a las 10.15 se medirán San Pedro y Mendigoiti, mientras que a las 11.30 jugarán Ezkaba y Virgen Blanca. La gran final se disputará el próximo martes, día de Reyes.
Osasuna ha conseguido ganar en cinco ocasiones -siete empatar- de las treinta visitas que ha realizado al Sevilla en su histórico de confrontaciones. Los rojillos son el único conjunto de la Primera División que todavía no conoce lo que es ganar lejos de su estadio esta temporada.