Derbi copero Primer asalto en El Sadar
Incógnita por el clima futbolístico
Ambos entrenadores coinciden en que, independientemente del resultado que se dé hoy, la eliminatoria se decidirá en San Mamés.
OSASUNA-ATHLETIC
Natxo MATXIN | IRUÑEA
Tanto los aficionados osasunistas como los rojiblancos confían en que el primer asalto de la eliminatoria copera que medirá a ambos conjuntos vascos no sea tan frío en lo futbolístico como la temperatura que se espera durante la tarde noche iruindarra, que estará bastante por debajo de los cero grados.
Claro que, si nos guiamos por los últimos compromisos de las dos escuadras, las expectativas no son precisamente halagüeñas. Osasuna tuvo la diosa fortuna de su lado en Sevilla, mientras al Athletic se le atascó el Espanyol, pero ni uno ni otro ofrecieron un nivel de juego como para sentirse orgullosos de su rendimiento.
Por eso, tanto los de Camacho como los de Caparrós tratarán de desquitarse en un envite tan especial y, a priori, tan equilibrado. Porque, si bien es cierto que la ubicación liguera de los vizcainos es bastante más desahogada que la de los navarros, estos últimos han entrado ahora en una dinámica positiva a la que quieren dar continuidad con el torneo del K.O.
Ausencias importantes
De todos modos, la dificultad del inminente calendario de los anfitriones los obliga a reservar a alguno de sus hombres importantes. Puñal, Plasil y Azpilicueta -los rojillos que más cargados están de partidos- se quedaron fuera de la convocatoria y es que el Barcelona arriba este domingo a El Sadar.
Con menos apuros clasificatorios y enemigos próximos más asequibles, el Athletic sólo dejó fuera de la lista a una de sus piezas esenciales en su equipo de gala: Yeste. Pero la ausencia del de Basauri más obedece a criterios deportivos que de cualquier otro tipo, dado que fue sustituido ante los periquitos y no parece pasar por su mejor momento.
Esa mejor predisposición de los rojiblancos hacia un torneo en el que llevan ya muchas ediciones tratando de reverdecer viejos laureles no es, de antemano, garantía de éxito, ya que los navarros buscarán enmendar en esta eliminatoria su hasta ahora adversa estadística copera con los bilbainos.
Mantener la portería a cero es una de las consignas que José Antonio Camacho ha transmitido a los suyos para el derbi de esta noche. El técnico murciano es consciente de que un gol del Athletic en El Sadar pondría muy cuesta arriba la eliminatoria de cara al partido de vuelta. «La experiencia te dice que el gol fuera de casa es bueno, por eso la clave está en no encajar y después, cuantos más marques, mejor», incidió el preparador rojillo.
Pase lo que pase, y de no darse un marcador escandaloso a favor de alguna de las partes, Camacho volvió a recordar, como ya hiciera el día en el que se conoció la eliminatoria entre rojillos y vizcainos, que ésta se decidirá en San Mamés. «Esto no es a un único partido y la eliminatoria tiene que morir en Bilbao», explicó. La escuadra navarra ya perdió en Liga en la Catedral por 2-0.
Recordando dicho encuentro y lo que ha venido ocurriendo desde entonces, el míster osasunista apuntó que «los dos equipos estamos muy parecidos. Nosotros hemos encarrilado el gol y ellos han sacado puntos en casa, por lo que espero un juego parecido, con balones largos a Llorente y algo más de lances al contrataque».
Como si hubiera hecho un ejercicio de telepatía a doscientos kilómetros de distancia, Joaquín Caparrós coincidió en casi todo con su colega en Iruñea. «Sabemos que la eliminatoria está al cincuenta por ciento porque somos dos equipos de un nivel muy parecido. Osasuna ha metido ocho goles en sus dos últimos partidos en casa y el que consiguió a última hora en Sevilla les hace creer más en lo que están haciendo. Van hacia arriba, pero todo pasa por el nivel del Athletic», subrayó.
En la línea de la concurrencia de declaraciones, el preparador utrerano ratificó que el pase «se va a decidir en San Mamés, en el segundo partido, independientemente del resultado que se dé mañana (por hoy) en Pamplona. Ya lo dije el día del sorteo y lo repito ahora».
No pasó inadvertido en sala de prensa que Yeste no entrara en la convocatoria. «No sólo falta Yeste, sino otros. Es normal que se enfadara cuando lo cambié, pero ahora lo importante es estar muy metiditos en el partido», trató de desviar el tema.
El Athletic no sabe lo que es ganar en feudo rojillo en las dos ocasiones en las que se ha medido a Osasuna en la competición del K.O., aunque en ambas los rojiblancos consiguieron el pase. En la edición de 1956 empataron a dos después de que la eliminatoria hubiera quedado decantada en San Mamés con un 4-1. En 1961, cayó por 1-0, pero remontó en la vuelta con un 2-0.
Apenas tuvieron acogida las 300 entradas que Osasuna envió a Bilbo, ya que sólo unas decenas fueron adquiridas por aficionados rojiblancos. La principal razón de tan escasa aceptación fue el desorbitado importe de los billetes, a precio único de 70 euros, ya que las mismas salieron a la venta a 20 euros para los socios rojillos, lo que habrá propiciado más de un hermanamiento interesado.
