Nuevas revelaciones sobre Iruña-Veleia
Las declaraciones realizadas ayer por tres arqueólogos contratados por la empresa que dirigía Eliseo Gil en la excavación de Iruña-Veleia dejan muy poco espacio para la duda sobre la nula veracidad de los descubrimientos que Gil mantiene haber realizado en el yacimiento alavés. Estos trabajadores hablan sin ambages de «anomalías e irregularidades graves de praxis arqueológica», que se suman a las ya denunciadas por la comisión de expertos que declaró falsos los grafitos de temática cristiana y con palabras en euskara.
Las revelaciones de los tres arqueólogos tienen el valor añadido de provenir de expertos que trabajaron a pie de excavación con Eliseo Gil, y de aportar datos difícilmente rebatibles sobre el método empleado. Así, desvelan que ninguno de los trescientos grafitos encontrados fueron hallados en el proceso de extracción, sino en el posterior de lavado, hecho que hubiera obligado a adoptar medidas cautelares para garantizar el método arqueológico. Y al hilo de esta circunstancia, afirman que «a uno se le pueden escapar uno, dos, cinco o diez grafitos, pero hay trescientos... y trescientos no se te escapan, porque tendrías que ser el arqueólogo más burro del mundo». Muy gráfico.