Himalaya | Invernal
Buen debut de Ines Papert en el alpinismo de altura
Intentó junto a otras dos compañeras una ascensión íntegramente femenina en la Norte del Kwangde Shar, pero se tuvo que retirar. Finalmente, con Cory Richards, abre «Cobra Norte». Una ruta de 1.400 metros y dificultades de WI5, M8, MD.
Andoni ABAOLAZA
Ines Papert es de sobra conocida por su habilidad en las competiciones de hielo (ha ganado, entre otros, el Campeonato del Mundo), así como en el alpinismo técnico tanto en hielo como en mixto. En pocas palabras, la alemana es una de las figuras actuales de la disciplina en el mundo. Pero tenía como tema «pendiente» la altura. Muy buena técnica como físicamente, pero hasta estas últimas fechas no había trasladado su portento al alpinismo de altura.
La apuesta ya estaba hecha: invierno en el gran murallón de la Norte del grupo del Kwangde. Un seismil con varios picos que se encuentra en la región nepalí del Khumbu. Como compañeras, sí en femenino, tenía a las canadienses Audrey Gariepy y Jen Olson. También formaban parte de la expedición dos estadounidenses: el cámara Chris Alstrin y el fotógrafo Cory Richards.
Las tres féminas tenían previsto escalar la famosa vía de 1982 abierta por Dave Breashears y Jeff Lowe (ED2, WI6, 1.200 m), la primera de la norte del seismil, y que lleva a la cima de 6.178 metros de altura. La ruta se encuentra justo a la derecha de toda la cara Norte, pero el intento se quedó a 5.850 metros. Era a primeros de año, y las bajas temperaturas y el fino hielo hicieron que el trío femenino se diera la vuelta.
Ya sin más tiempo, Gariepy y Olson volvieron a casa. Por su lado, Papert contaba con más vacaciones. La alemana le tenía muchas ganas a ese murallón, y convenció a Richards para un intento justo al lado opuesto de la primera actividad; a la izquierda de la pared donde, al parecer, el hielo era mejor. Así, el pasado día 18, la cordada se hacía con «Cobra Norte» (1.400 m, WI5, M8, MD), un itinerario que puede traducirse como una variante de la ruta «Extra Blue Sky» de 1996. Una línea abierta por un equipo francés, en la que sólo Christophe Profit y André Rhem pisaron cumbre.
Duras condiciones
Tras cinco días de porteos, Richards y Papert comienzan la escalada con fuertes vientos y temperaturas de hasta 25º bajo cero. Suben por un couloir a la izquierda de la ruta francesa; se une a ésta a mitad de altura y en el segundo día de escalada. Son 10 horas de lucha en plena ventisca y en terreno complicado de nieve y hielo.
Durante la segunda jornada, llega el turno para los sustos. Un desprendimiento de piedras les hace abandonar el vivac montado, y, tras otras 10 horas de batalla, montan el segundo vivac. Según aseguran los protagonistas, Papert lideró los largos más difíciles. Desde ese punto, la cordada quería encarar el gran bastión de granito que tenían por delante, una ruta directa a cima, pero desistieron y emprendieron el camino hacia la arista Nordeste. Es decir, hacia la línea original de la cara norte del grupo del Kwangde y escalada en 1978.
Iban rápidos y ligeros, e intentaron hacer cima, pero se toparon con un terreno bastante complicado, tan duro como la propia cara Norte. Ya deshidratados y con muchas nubes deciden retirarse hasta el último vivac, dejando cuerda fija puesta.
Era el cuarto día de escalada, el pasado día 18, cuando Papert y Richards hicieron cima. Tenían sol, pero fuertes vientos. Suben por las cuerdas fijadas en la anterior jornada. Dejan atrás la zona más complicada donde Papert tuvo que luchar durante más de 40 minutos en una placa difícil. Tampoco le ayudaron las precarias protecciones que tuvo que poner. Finalmente, hacia las 14.30, la cordada de alpinistas hace cima en el Kwangde Shar de 6.093 metros.
A la nueva vía (o importante variante de la «Extra Blue Sky») le han llamado «Cobra Norte», una línea de 1.400 metros y dificultades técnicas de WI5 en hielo y M8 en mixto. Algo parecido, salvando las distancias y la altura, a la cara Norte de Les Droites (Alpes franceses).
La ruta francesa ya ha contado con alguna otra variante como una checa, y es la vía o zona con más concurrencia de la cara Norte del Shar-Lho. Todo ello, al parecer, por ser la línea de escalada, a menudo, en mejores condiciones.
Durante la segunda jornada de ascensión, llega el turno para los sustos. Un desprendimiento de piedras les obliga a abandonar el vivac y, hasta 10 horas más tarde, no pueden montar el segundo.