La escritora norteamericana Sue Grafton, autora de la serie «Alfabeto», protagonizado por el detective Kinsey Millhone, señaló ayer en Barcelona que desde un punto de vista literario resulta «más interesante la maldad que anida en la gente corriente».

Grafton comenzó la serie literaria con «A de Adulterio» para superar su divorcio. Lo que en principio era un canal de superación personal, con el paso del tiempo «se ha convertido en mi vida y es lo único que sé hacer», confiesa.

Grafton participa en Barcelona en la Semana de Novela Negra, BCNNegra, a la que llega con una novedad, «T de trampa» (Tusquets), en la que Millhone investiga el caso rutinario de una colisión entre dos vehículos.

La escritora estadounidense ha dedicado meses a investigar sobre las diferentes tramas tratadas en su novela, en este caso el maltrato de los ancianos.

La `madre' de Millhone prefiere indagar para «mostrar cada vez una historia distinta, sin entrar en los detalles más escabrosos».

Para la `dama del crimen', si se habla de novela negra, «la tensión debe centrarse en la maldad que habita en el corazón de las personas».

Sobre su negativa a que se adapten sus novelas en el cine, dijo que «preferiría vender mis hijos para la trata de blancas que ver mis libros convertidos en películas».

Sobre el futuro del detective Millhone, Grafton señaló que «el personaje vivirá para siempre, pero yo, que cuando termine tendré 80 años, me dedicaré a hacer ganchillo, pasear y jugar con mi gato y mis nietos».