La vigésimo segunda jornada de la Liga ACB no tuvo sorpresas, pero sí resultados ajustados. Uno de ellos, el que disputaron en el pabellón San Pablo de Sevilla Cajasol y Real Madrid, trajo una polémica victoria para los de Joan Plaza por 92-95 después de dos prórrogas.

El conjunto merengue sufrió lo indecible ante un Cajasol que encontró en sus interiores Savanovic y Xavi Rey a sus mejores hombres, pero Sergio Llull y sweet Lou Bullock supieron dar la réplica. Tras los cuarenta minutos reglamentarios, el partido debió irse a la prórroga con un empate a 71.

El primer tiempo extra tuvo una actuación arbitral que ayudó y no poco a los madrileños, pero un palmeo de Ignerski alargaba aún más el partido, al empatar a 82. Ya en la segunda prórroga, los de Joan Plaza impusieron la lógica.

Su némesis, el Barcelona, tuvo menos problemas para deshacerse de un CAI Zaragoza en plena cuesta abajo. Los 17 puntos de Navarro fueron demasiado para los entrenados por Alberto Angulo.

Pamesa abre distancias

La pelea por el octavo lugar promete ser encarnizada, máxime cuando Fuenlabrada, octavo clasificado que en la jornada de ayer descansaba, tiene a Ricoh Manresa empatado a victorias, diez, tras su triunfo a domicilio ante el CB Murcia por 56-65. Asimismo, el triunfo de CB Granada en Bilbo metía a los nazaríes en esta misma pelea, sin olvidar a unos abatidos hombres de negro.

Pero quien mejor partido sacó a la jornada de ayer fue el Pamesa. Los de Neven Spahija, que caminan por el «lado salvaje» de la irregularidad, machacaron por 87-56 al ViveMenorca, con una gran actuación de Vule Avdalovic y Albert Miralles. Gracias al triunfo de ayer, el cuadro taronja abre una brecha de dos victorias respecto a la octava plaza. Por una vez, parece que a orillas del Turia las aguas no bajarán revueltas.