El nuevo trabajo de Danny Boyle lleva Bollywood al realismo occidental
GARA | MADRID
En la película «Slumdog Millionaire» no hay decorados, las actrices no son bellísimas y los actores no son culturistas, y es que el cineasta Danny Boyle ha querido «trasladar la fantasía de Bollywood al realismo occidental» con este filme, que figura entre los favoritos a los Oscar con diez candidaturas. El cineasta británico, responsable de éxitos como «Trainspotting», «La playa», y «28 días después», considera que, pese a «no tener estrellas en el reparto, ha llegado a millones de espectadores, porque demuestra que, tengas la vida que tengas, puedes conseguir lo que deseas».
En «Slumdog Millionaire», con un guión de Simon Beaufoy basado en una novela de Vikas Swarup, Boyle cuenta cómo Jamal Malik, un joven pobre de Bombay que, para sorpresa de todos, arrasa en la versión india del programa «¿Quiere ser millonario?», pero a una pregunta de ganar veinte millones de rupias, es detenido e interrogado por la Policía, que sospecha de que está haciendo trampas. Antes de iniciar el rodaje, Boyle decidió que quería un equipo mayoritariamente indio, «ya que los técnicos de Bollywood están acostumbrados a hacer decenas de películas al año». Pero, cuando llegó el momento de elegir a los protagonistas, se encontró con que todos los actores eran «guapos y estaban cachas», y lo que «necesitaba era un joven que diera la imagen de perdido y melancólico. Entonces, fue mi hija quien me recomendó al británico Dev Patel, muy popular por una serie de televisión». En cuanto a los más pequeños, todos provenían de familias muy pobres de las chabolas, como es el caso de Asharuddin Mohammed Ismail, quien interpreta al pequeño Salim, y Rubina Ali, que da vida a Latika. Completan el reparto Anil Kapoor, Freida Pinto, Madhur Mittal e Irrfan Khan, conocido por su papel en «El buen hombre», de Mira Nair.
Música y localizaciones
La película está rodada en lugares emblemáticos de India, como la estación Victoria de Bombay o el Taj Mahal en Agra, pero también en el suburbio de Dharavi, uno de los más grandes del país, y en el de Juhu, uno de los más bulliciosos, porque está situado en el aeropuerto en cuyas pistas los niños juegan a la pelota y en donde se calcula que viven un millón de personas. Otro de los atractivos de la cinta es la banda sonora del compositor indio A.R. Rahman, habitual del cine bollywoodiense, que ha contado con la estrella de la canción Mia Arulpragasam para interpretar el tema «Paper planes».