Los consejos de Desarrollo y de Electos quieren que París atienda la especificidad vasca
Los presidentes de los consejos de Electos y de Desarrollo de Ipar Euskal Herria han manifestado «la necesidad de preservar» dichas entidades o, en su caso, se ensayen otras fórmulas para atender la especificidad vasca.Arantxa MANTEROLA |
«Un país tan específico como el nuestro debe tener la posibilidad de expresarse. Por ello hemos confirmado la solicitud de audiencia a la comisión Balladur, solicitud que también será trasmitida a la Ministra de Interior Michèle Alliot-Marie». El actual presidente del Consejo de Electos, Jean-Jacques Lasserre, realizó estas declaraciones junto al presidente del Consejo de Desarrollo Jean-Baptiste Etcheto, ayer en Baiona.
Lasserre se refería a la preocupación que ha despertado en el seno de los dos Consejos la posibilidad de que, en el marco de la reforma de las colectividades territoriales, las estructuras de pays desaparezcan por lo que la pervivencia del propio Consejo de Desarrollo estaría en peligro.
Esta perspectiva es impensable para Lasserre que, asegurando que tanto el conjunto de la estructura de electos que representa como los miembros del Consejo de Desarrollo comparten el mismo propósito, incidió en que «hay que hacer oir la voz del País vasco». Estima que la comisión que en estos momentos estudia la reforma no debe abordar Ipar Euskal Herria como cualquier otro pays. Es por ello que hace varios días solicitó ser recibido por la comisión.
Lasserre mantuvo anteayer una larga conversación telefónica con miembros cualificados de dicha comisión y les reiteró la necesidad de que contemplen la especifidad de los tres herrialdes y el trabajo acometido por las estructuras que, considera, hay que respetar y salvaguardar: «Tanto el plan Pays Basque 2010 como el que está actualmente en marcha, Pays Basque 2020 han transferido importantes responsabilidades a gran número de agentes sociales y creo que el País vasco debe conservar y desarrollar dichas responsablidades».
Reformar es «normal»
El presidente del C.E. insistió en que no está contra la readecuación del sistema administrativo del Estado «porque es normal y conveniente revisar y simplificar las estructuras».
A renglón seguido añadió, sin embargo, que «racionalización no significa centralización»: «En los últimos meses todas las reformas van en el sentido de centralizar las diferentes estructuras en el nivel regional. Acabamos de tener un ejemplo muy desagradable de sus consecuencias con ocasión de la reparación de la red eléctrica tras el paso del ciclón. En muchos casos, en particular en las zonas rurales, éstas se han demorado mucho por la desaparición de los puestos locales que acarreó la centralización de medios de la EDF (Electricité de France)».
El presidente del Consejo de Electos abundó en el mismo sentido que Lasserre y coincidió con él en «la necesidad de que el País vasco sea vinculado al estudio de estas reformas».
Sin desmerecer a otras zonas que hoy en día tienen también el estatuto de pays, Etcheto subrayó que «por la dimensión, por el número de actores sociales implicados en los dos consejos, por el modo de funcionamiento y por las realizaciones y experiencias demostradas durante los 15 años de existencia» no pueden ser analizado con el mismo rasero. «Hemos sabido inventar un modo de gobernarnos excepcional que hay que preservar. Puede ser, incluso, un modelo a copiar. Sería absurdo que un sistema que funciona sea eliminado, máxime cuando el propio estado lo ha validado» manifestó.
Fórmulas originales
Etcheto insistió en que tienen la firme voluntad de hacerse oir en todas las fases del debate, sea en la de elaboración del proyecto por la comisión, sea en la del debate en la Asamblea Nacional. Los dos presidentes afirmaron estar dispuestos a ensayar fórmulas originales o dispositivos nuevos para que «el poder decisorio y financiero» de Ipar Euskal Herria se mantenga próximo al territorio gestionado.
Lasserre y Etcheto están «extrañados» por la escasa atención que, globalmente, suscita la reforma. Creen que ésta será «muy importante y tendrá consecuencias en los modos de gestión».
El presidente del Consejo de Electos, insiste en que, debido a la especificidad de los tres territorios, deben ser escuchados de modo particular «como lo han sido los corsos».