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El Constitucional pega el primer cartel

La ciudadanía de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa vivió las horas previas al inicio oficial de la campaña electoral con la atención fija en la decisión del Tribunal Constitucional sobre los recursos de amparo presentados por la plataforma electoral Demokrazia 3.000.000 (D3M) y el partido Askatasuna. Sobre su decisión no cabían muchas dudas a estas alturas, y por eso resulta más significativo aún que la hiciera pública exactamente a las 23.59, un minuto antes del plazo tope estipulado. De esta manera, aunque no sea algo nuevo en Euskal Herria, el estamento judicial se ha arrogado un papel central en un capítulo de la vida pública en el que, según la más elemental teoría democrática, debiera mantenerse al margen dejando el protagonismo exclusivamente a la voz del pueblo. De la mano del Ejecutivo español, con el aplauso incondicional de unos medios de comunicacion afectos al discurso unionista de PSOE y PP, y ante la pasividad de quienes, empezando por el propio lehendakari, tienen en su manos no pocos mecanismos del proceso electoral, han sido los magistrados del Tribunal Constitucional los encargados de pegar el primer cartel de la campaña.

Un cartel diseñado con el único objetivo de dejar a un amplio sector de la población vasca fuera del proceso electoral y, por ende, de la vida política en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. Y un objetivo a cuya consecución se han dirigido todas las baterías, con una estrategia judicial diseñada al milímetro para no dejar resquicios y con una pasividad política que da cobertura a la maniobra aunque su resultado final sea la manipulación de la composición de las instituciones, que ya en modo alguno podrán denominarse democráticas.

No son los partidos vascos, sino el Tribunal Constitucional español, el que abrió la campaña al Parlamento de Gasteiz. Se trata de una instancia que representa el culmen de la ley española, pero que carece de legitimidad para definir el futuro político de Euskal Herria. Un futuro que sólo deben decidir, de una u otra forma, los ciudadanos vascos con su voto. Esta tarea estaba pendiente antes, y lo está todavía más desde las 23.59 de ayer.

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