Cinco jóvenes de Barakaldo, integrantes de la Gazte Asanblada de esta localidad de Ezkerraldea, van a ser juzgados mañana en la Audiencia Nacional, tras conocer esta misma semana cuáles son las imputaciones que pesan en su contra. A cuatro de ellos les acusan de haber atacado un cajero automático, y a dos les imputan también un «delito de colaboración». Al quinto joven, por su parte, le acusan de «integración en organización terrorista» argumentando que es militante de Segi.

Se da la circunstancia, tal como recordaron ayer desde la Gazte Asanblada, que estos jóvenes estuvieron todo un año siendo «acosados» policialmente, y que en ese tiempo interpusieron varias denuncias por este motivo, indicando los vehículos policiales utilizados para ello.

El juicio tiene su origen en la operación policial del 6 de mayo de 2008, cuando la Ertzaintza detuvo a cinco personas y trató de detener a otras dos. Tras pasar ante el juez, dos fueron encarcelados, y lo mismo sucedió con otros dos que buscaba la Policía autonómica, que se entregaron el 1 de julio junto a varios jóvenes de Oarsoaldea. Ahora, de los siete jóvenes afectados por aquella operación, el fiscal ha decidido imputar a cinco, entre ellos, a los cuatro encarcelados.

Libertad y entregas

Por otra parte, según informó ayer el movimiento pro amnistía, Maitane Intxaurraga, detenida en agosto de 2008 en una operación de la Policía española en Nafarroa, quedará libre hoy tras pagar una fianza de 8.000 euros. La joves se encontraba en la prisión de Soto del Real.

Las autoridades francesas, por su parte, entregaron a la Policía española a los presos políticos vascos Ismael Berasategi y Aitor Kortazar.