Varios miembros de la plataforma que exige unos servicios sociales públicos protagonizaron ayer un encierro que se alargó más de 4 horas en protesta por la falta de respuesta obtenida a sus peticiones de reunión con la diputada de Política Social de Araba, Covadonga Solaguren.

Los miembros de la plataforma compuesta por 27 organizaciones se personaron en la sede de la Diputación con la intención de ser recibidos por la diputada. Según detallaron en un comunicado, en las últimas semana han presentado varios escritos instando a una reunión para valorar la situación de los servicios sociales en Araba.

Sin embargo, no han recibido ninguna contestación a su petición y en respuesta a esa situación decidieron encerrarse en las instalaciones de la Diputación hasta ser atendidos.

Una vez dentro el secretario de la diputada les comunicó que se encontraba reunida y que trataría de hacer «un hueco en su agenda». No obstante, horas más tarde el jefe de los Miñones les informó de que nadie recibiría a los miembros de esta plataforma invitándoles a abandornar la institución.

«Problemas urgentes»

Desde la plataforma señalaron que los problemas a tratar son «urgentes» y se merecen una respuesta. Entre los aspectos a abordar se encuentran la creación del Consejo Sectorial de Servicios Sociales en Araba o analizar el conflicto de la residencia Ariznavarra.

Según criticaron, las respuestas de Solaguren sólo aparecen mediante artículos de opinión e instaron a que responda «de manera inmediata» las preocupaciones de la ciudadanía.