El Cairo acogerá desde mañana el diálogo entre grupos palestinos
Tras un reunión preparatoria de alto nivel que tendrá lugar hoy, El Cairo acogerá a partir de mañana el diálogo para la reconciliación entre los grupos palestinos. El objetivo es conseguir la unidad nacional palestina para hacer frente al ocupante israelí. Sin embargo, durante las últimas horas, se han sucedido las críticas mutuas entre Hamas y Al-Fatah, las dos principales formaciones palestinas.GARA |
El diálogo para la reconciliación entre los grupos palestinos comenzará mañana en El Cairo, precedido de una reunión preparatoria de alto nivel, que se desarrollará hoy, según fuentes palestinas.
Las conversaciones reunirán, entre otros, al movimiento islamista Hamas, que controla Gaza, y a Al-Fatah, el grupo del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, que controla Cisjordania. Además, estarán presentes delegados de otras formaciones palestinas. La mediación estará a cargo de las autoridades egipcias.
Este diálogo tenía que haberse celebrado el 10 y el 11 de noviembre pasado, pero Hamas anunció a última hora que se negaba a participar al considerar que no se daban las condiciones para asegurar el éxito de la negociación. La ofensiva israelí contra Gaza retardó una nueva ronda de conversaciones.
En la cita preparatoria de hoy estarán presentes, entre otros, el número dos de Hamas, Musa Abú Marzuk, quien llegó a El Cairo desde Damasco, según confirmó en declaraciones realizada a Al-Jazeera. En la delegación de Hamas estará presente también Mahud az-Zahar.
Según fuentes próximas a las conversaciones, Abú Marzuk se reunirá con el ex primer ministro de la Autoridad Palestina Ahmed Qureia.
En las últimas horas, se ha incrementado la tensión entre las formaciones palestinas. Así, Hamas ha acusado a agentes de seguridad de Al-Fatah de espiar a los miembros de su formación durante la masacre israelí en Gaza para entregar a los sionistas información sobre la ubicación de los dirigentes de la formación islamista. Asimismo, acusó a agentes de Al-Fatah de proporcionar datos a la Aviación israelí sobre los túneles clandestinos entre Rafah y Egipto. Al-Fatah ha rechazado estas imputaciones y ha responsabilizado a Hamas de intentar torpedear los esfuerzos de reconciliación palestina.
Denuncias de Hamas
Mahmud az-Zahar destacó que «hemos publicado fotografías de lo que ellos llaman detenidos políticos en Gaza. Son personas que han confesado que le proporcionaron al enemigo [Israel] información sobre dónde estaban apostados los combatientes y los túneles y el tipo de armamento».
Hamas también ha reclamado a Al-Fatah que libere a los presos encarcelados en prisiones de Cisjordania.
Abú Marzuk, sin embargo, restó importancia a esta escalada verbal. «Vamos a dialogar sobre los temas pendientes de una forma sabia y objetiva», declaró a la televisión qatarí por satélite Al-Jazeera.
Se prevé que se establezcan cinco comisiones para alcanzar acuerdos sectoriales entre las formaciones palestinas de cara a lograr la unidad de acción nacional. Entre las cuestiones que se debatirán en la capital egipcia, se encuentran la reforma de la histórica OLP, sumida en la inoperancia y de la que Hamas no forma parte, la de los servicios de seguridad y la formación de un Gobierno de unidad nacional.
Az-Zahar, por su parte, denunció que algunos funcionarios palestinos, apoyados por EEUU, están obstruyendo el diálogo interpalestino. «Hay gente que quiere que este diálogo no tenga lugar ya que perderán sus posiciones y sus privilegios», señaló a Reuters desde la ciudad egipcia de Ismailiyah.
El dirigente de Hamas insistió en que los servicios de seguridad de Al-Fatah detuvieron a decenas de sus miembros en Cisjordania durante la semana pasada. «Los arrestos no sirven al diálogo. Hay agencias de inteligencia estadounidenses trabajando en Cisjordania», insistió Az-Zahar.
La izquierda israelí mostró ayer nuevamente su debilidad con el fracaso de su convocatoria ante la sede de la Knesset en contra del racismo el mismo día en que los nuevos diputados asumían su cargo en un Parlamento donde 93 de los 120 escaños corresponden a partidos de derecha o ultraderecha.
La protesta, con una veintena de participantes, aunó a militantes del partido sionista de izquierdas Meretz, que ha perdido tres de sus seis escaños en estas últimas elecciones, y del Hadash, el partido comunista árabe- israelí, también con tres asientos en la Knesset.
Entre los manifestantes estaba Mossi Raz, ex presidente de la mayor organización pacifista del país, Peace Now, y ahora militante de Meretz. «Queremos presionar para que los fascistas de Israel Beitenu y Unidad Nacional queden fuera del Gobierno. Sobre todo, dar un mensaje a los laboristas para que se nieguen a legitimar o a tomar parte en un gabinete con grupos de ideología racista». Raz culpa claramente al Meretz de haber perdido los votos por no haberse posicionado en contra de la masacre de Gaza desde el primer día y «porque muchos pensaron que el voto útil para frenar a Netanyahu era votar Kadima».
Yuval Drier, militante del Hadash, fue mucho más claro. «Estamos aquí porque tenemos miedo. Tenemos miedo de la opinión pública israelí a la que no le importa elegir democráticamente a fascistas como Avigdor Lieberman y que el líder de Israel Beitenu acabe con la democracia en Israel», explicó a GARA.
Tanto Hamas como el FPLP criticaron a Amnistía Internacional (AI) porque en el informe que hizo público el lunes sobre la masacre de Gaza ponía al mismo nivel a víctimas y verdugos.