El fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, citó ayer a Aralar como constatación de que la izquierda abertzale «puede salir del gueto». En un desayuno con los medios en Madrid, el promotor de la ilegalización de D3M y Askatasuna utilizó este término para definir la situación de los votantes del sector proscrito, y recurrió a Aralar para argumentar que «ese gueto no es ningún Guantánamo».

«Hemos visto cómo un sector de la población de la izquierda abertzale ha salido de ese gueto. Pueden salir libremente, no tienen rejas ni tienen verjas. Y algunos han salido de este gueto para ir a votar a una opción de la izquierda nacionalista como es Aralar, que sin embargo es una opción legítima», defendió Conde-Pumpido.

Los impulsores de la ilegalización nunca habían saludado de modo tan explícito el voto obtenido por Aralar, que ha obtenido amplio realce mediático en el Estado español.

Pese a que el análisis objetivo de los datos evidencia que los 34.000 nuevos votos obtenidos por Aralar respecto a 2005 coinciden con la debacle de sus ex socios de EB y de EA, el fiscal general del Estado insistió en atribuir ese crecimiento a «un sector de la izquierda abertzale». «Y esto demuestra que la Ley de Partidos no encierra en absoluto a ningún sector en un ningún espacio cerrado», añadió Conde-Pumpido.

En la misma intervención, el fiscal general nombrado por el Gobierno del PSOE se jactó de que se han ilegalizado ya doce «marcas blancas de ETA» y saludó que se ha ido perfeccionando «la forma en la que nos enfrentamos a este problema». En esta ocasión, las ilegalizaciones han tenido como novedad que han ido precedidas de detenciones, encarcelamientos e imputaciones para facilitar la actuación por vía penal del juez Baltasar Garzón, que complementó el procedimiento abierto por el Supremo y culminado por el Constitucional.

«Hemos hecho lo que procedía en cada momento y se ha logrado impedir el acceso de cualquier marca ilegal al Parlamento Vasco», indicó el fiscal general. Conde-Pumpido alcanzó notoriedad en 2007 por unas declaraciones en las que admitía que «quizás nos hemos pasado con ANV, pero ha colado». Ayer dijo que en estos años «hemos ido mejorando jurídicamente» la aplicación de la Ley de Partidos, «hasta el punto de que hemos podido impugnar D3M y un partido durmiente como Askatasuna, algo que fue muy difícil».

«Somos más»

Desde Aralar se afirma que estas elecciones han mostrado que su sector -al que denominan «nueva izquierda abertzale» o «izquierda abertzale civil»- tiene más apoyo que los ilegalizados, pese a que el domingo se computaran 101.000 votos anulados por 62.000 de Aralar.

Patxi Zabaleta indicó ayer en Iruñea que «la izquierda abertzale política somos más y vamos a ser muchos más». «Somos la izquierda abertzale política, que no admite condicionamientos que no sean estricta- mente políticos».

En una entrevista a Herri Irratia, el número dos de esta formación, Jon Abril, también dijo que «si se tienen en cuenta los siete territorios de Euskal Herria, la manera de hacer política de la izquierda abertzale desde los cauces exclusivamente políticos que tiene AB en Iparralde, la presencia de Aralar en Navarra y, ahora, el aumento de votos también en la CAV, se refleja que ya somos más los que apostamos por la izquierda abertzale civil y pacífica, ante los que todavía no han dado ese paso».

Contrariamente a los mensajes que lanzan muchos medios desde el domingo, Aralar admite que su nuevo voto no procede mayoritariamente del sector ilegalizado. «Puede incidir algo», dijo su vicecoordinador general al ser preguntado al respecto. Jon Abril prefirió destacar que «comicio tras comicio, Aralar viene mejorando».