Tras las elecciones del 1-M
Urkullu avisa de que el apoyo del PP al PSE generará inestabilidad
GARA | GASTEIZ
El lunes, el presidente del BBB, Andoni Ortuzar, advirtió de que el PNV entendería que le quitaran la presidencia como «una agresión política» ante la que responderían «con todos los elementos a nuestro alcance». Incluyó la retirada de apoyo de sus diputados al Gobierno de Rodríguez Zapatero. Ayer, era el presidente del EBB el que lanzaba otro aviso: la elección de Patxi López como lehendakari con el apoyo del PP creará «inestabilidad institucional», porque no será un apoyo gratuito, sino que reclamará la Diputación de Araba y la Alcaldía de Getxo.
En una entrevista en Radio Euskadi, Urkullu añadió que el PSE debe ser consciente de que si acepta sus votos, «le está dando el triunfo al PP en España».
Según señaló, la posibilidad de que Patxi López alcance Ajuria Enea con los votos de Antonio Basagoiti es «la escenificación de algo cocinado hace tiempo». Pero, a su entender, «ese planteamiento del cambio por el cambio sin ningún contenido por detrás de ese planteamiento, un planteamiento que buscaba el castigo a Ibarretxe, no se ha visto refrendado por parte de la sociedad vasca».
Por ello, llamó a la sociedad a «que se dé cuenta del juego de lenguajes que utilizan el PSE, el PSOE y el PP, de la mentira en la que pretenden instalar a la sociedad con el apoyo de determinados grupos mediáticos».
En esta línea, dijo que su partido «ha conseguido el refrendo de una parte importante de la sociedad vasca» y que ha sido el vencedor, pero «se puede ver desplazado». «La sociedad vasca tiene que percibir esto. Estamos ante una situación de crisis, que exige el esfuerzo de todas las formaciones políticas», señaló Iñigo Urkullu.
A su juicio, pese a la pluralidad existente, el PSE utiliza «un juego de lenguajes que quiere esconder el frentismo en el que ha estado instalado junto con el PP». En su opinión, los gobiernos se pueden realizar con acuerdos de coalición o con pactos de legislatura, gobernando en minoría.
Urkullu remarcó que el PNV no renuncia a que el lehendakari sea del PNV porque «ha sido la fuerza más votada y ganadora en las elecciones autonómicas» y también respondió que «no sacrificará» a su candidato. «Tenemos, además, en el PNV experiencias dolorosas como la de Juan María Atutxa», añadió.
El presidente del EBB afirmó que en su reunión con el PSE le trasladarán «que su discurso del cambio no ha tenido ningún éxito en las elecciones del domingo pasado, que es un discurso frentista que pudiera estar ocultando de manera interesada en la apoyatura del PP, que no es a cambio de nada, que el partido ganador es el PNV con cinco o seis escaños más y que hay más de 80.000 votos de diferencia».
Miren Azkarate, sorprendida
Por su parte, la portavoz del Gobierno de Lakua en funciones, Miren Azkarate, se quedó ayer sorprendida cuando le preguntaron si estaban ya preparando el traspaso de poderes. Tras un instante en silencio, respondió que «los traspasos de poderes se hacen cuando hay un cambio y con total normalidad, pero no entendemos por qué tiene que haber cambio de lehendakari, francamente».
Tras el Consejo de Gobierno de los martes, la portavoz precisó que la «valoración de los resultados [de las elecciones] le corresponde a cada uno de los partidos», pero hablando en nombre del lehendakari en funciones indicó que Ibarretxe «ha ganado las elecciones con contundencia y con holgura».
Por tanto, defendió que al candidato del PNV le corresponde, junto con su partido, adoptar la iniciativa de «hablar con todos los partidos con represen- tación parlamentaria para alcanzar los acuerdos que sea posible tomar».
Representantes de los sectores críticos de Ezker Batua han comenzado a pedir públicamente la dimisión del coordinador general de la formación, Javier Madrazo. Según algunas fuentes, Madrazo ya habría tomado esa decisión el pasado domingo, pero espera a poder formalizarla en el lugar y el momento adecuados, es decir, ante los órganos de la dirección que se reunirán en los próximos días.
Respecto al otro partido en crisis, Eusko Alkartasuna, su ejecutiva de Gipuzkoa tachó los resultados de «gran fracaso» y consideró «claramente insuficiente» la convocatoria de un congreso extraordinario para elegir una nueva dirección nacional. El órgano que preside Iñaki Galdós exige como «absolutamente necesario» que se desarrolle «un serio debate político que debe concluir en una revisión y rectificación de la línea estratégica» que consideran ha sido la razón por la que EA está en una «situación crítica». Realizan ese emplazamiento con la autoridad que, a su juicio, les confieren los resultados, por «ratificar» la opinión de los guipuzcoanos.
firmas se han recogido ya en la UPV por la libertad de la profesora Arantza Urkaregi. Entre ellos hay vicerrectores, decanos, directores, profesorado y personal de administración y servicios. «Hay que parar esta injusticia», dicen.
Pese a la evidencia de que la ilegalización se ha consumado y que la izquierda abertzale no va a estar en el Parlamento de Gasteiz, el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, mantiene el discurso de que existe una maniobra conjunta entre la izquierda abertzale y el PSOE para desalojarles de Ajuria Enea, en la que ahora incluye también al PP. El domingo por la noche afirmó en ETB que los ilegalizados «no están porque no han querido». Ayer insistió en ello en ``Deia'' y más tarde afirmó en Radio Euskadi que «éste es un juego en una pinza entre una parte la izquierda abertzale o la izquierda radical y el PSOE y el PP, una pinza en la tesis del 'cuanto peor, mejor'».
