Balance de la pérdida de recaudación tributaria en 2008
La recaudación por el Impuesto de Sociedades baja 342 millones
ELA exigió en Bilbo que las haciendas forales den marcha atrás en la política de reducción de impuestos a los empresarios y a las rentas del capital. La secretaria general adjunta, Amaia Muñoa, afirmó que las rentas de trabajo tributaron un 7% más en 2008 y las rentas empresariales cayeron en un 9,7%, y añadió que no hay razón para reducir el Impuesto de Sociedades.
Juanjo BASTERRA | BILBO
ELA afirmó ayer en Bilbo que la presión fiscal en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa ha caído al 18,5% del PIB. Está en los niveles mínimos desde 1998, fecha en la que comenzaron a gestionar todos los impuestos especiales. Sin embargo, las rentas salariales tributaron más, lo que supone, según expresó Amaia Muñoa, secretaria general adjunta de ELA, que las rentas empresariales «han reducido el pago de impuestos». A su juicio, «eso no ocurre porque sí, sino porque las instituciones vascas se han puesto al servicio de los empresarios, de los que más tienen».
Muñoa estuvo acompañada por Mikel Noval, secretario de Política Social, y de Iñaki Zabaleta, miembro del Gabinete de Estudios de ELA. La central sindical presentó el informe «Recau- dación de Impuestos en la CAV» y, a la vista de sus conclusiones, exigió «justicia fiscal» y que se dé «marcha atrás» en las reformas que se han aplicado en los últimos años, porque sólo han favorecido a la élite económica y financiera. «Todas estas modificaciones que se realizan de forma continua sólo han supuesto el deterioro de la justicia social y el beneficio exclusivo para las rentas de capital, en perjuicio de las rentas de los trabajadores, que son los que sostienen la recaudación tributaria». También reclamó una lucha eficaz contra el fraude fiscal.
En este caso, Mikel Noval señaló que «choca que la recaudación del IVA haya bajado un 11,8%, mientras el consumo final de los hogares ha aumentado en un 1,1% en 2008 en términos reales, según los datos de Eustat». Para el miembro de la Ejecutiva de ELA, «sería totalmente incompatible esta evolución, ya que en una situación normal, siempre que el consumo sube, el IVA debería incrementarse, porque es un impuesto que grava precisamente el consumo. No obstante, cabe pensar que el alto nivel de fraude existente en este impuesto está aumentando, dando lugar a esa distorsión recaudatoria».
938 millones menos en 2008
Las diputaciones forales de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa recaudaron en 2008 un total de 12.834,2 millones, lo que supone un descenso del 6,8% respecto a 2007. Fueron 937,9 millones menos que un año antes.
ELA reconoce que «los impuestos directos ganaron peso respecto a los indirectos, lo que supondría, en teoría, un avance, ya que se gravaría según el nivel de renta», indicó Mikel Noval, pero a renglón seguido precisó que «no se debió a que se hayan puesto en práctica políticas fiscales progresivas, proclives a tener en cuenta la situación económica de cada contribuyente. El resultado se debe -afirmó el sindicalista- a que la recaudación de los impuestos indirectos bajó un 11,9% y la de los directos, un 1,6%, a pesar de que se ha producido un aumento del IRPF y sendas bajadas del IVA y del Impuesto de Sociedades. La conclusión, por lo tanto, es que existe una peor distribución de la recaudación tributaria».
Los empresarios pagan menos
Según los datos que aportó ELA, «la recaudación por el IRPF aumentó el año pasado un 4,5%, pero en el resto de impuestos se ha recaudado menos que un año antes». La mayor merma de ingresos tributarios se ha producido con el Impuesto de Sociedades, que bajó en un 16,8%, lo que ha supuesto «dejar de recaudar 341,9 millones; seguido del IVA, con una reducción del 11,8%, lo que supone una caída de ingresos para las arcas de 571,9 millones, a lo que hay que añadir la merma de un 1,5% en los Impuestos Especiales.
Desde el punto de vista de los impuestos directos, los datos aportados por Iñaki Zabaleta confirman que «las rentas de trabajo en el IRPF son las únicas que han aumentado su recaudación en mayor cantidad que en el ejercicio anterior, con un 7% más. Las rentas empresariales han disminuido un 9,7% en comparación con un año antes. Es cierto que este descenso se debe a la caída en la recaudación del Impuesto de Sociedades del 16,8%, porque las rentas empresariales gravadas por el IRPF crecieron en un 19,2%».
Situación «muy grave»
Esta situación es «muy grave» para ELA, sobre todo, en la actual situación de crisis, por lo que significa de pérdida de recaudación económica para avanzar en políticas de gasto social ante los fuertes incrementos del desempleo. Muñoa demandó de las haciendas vascas «un cambio radical de política fiscal», que tenga en cuenta, como eje central, el modelo de sociedad, para lo que «deberían de dar marcha atrás» en las últimas reformas que sólo han favorecido a la élite económica. En este sentido, la secretaria general adjunta señaló que «no es posible que la presión fiscal en las rentas salariales, a través del IRPF, siga por encima de las rentas empresariales».
Tampoco consideró necesario que se reduzca el tipo del Impuesto de Sociedades por dos motivos: porque sólo grava a las empresas que obtienen beneficios, es decir, que las que están en crisis no pagarán ese impuesto, y porque la reducción del tipo está injustificada. Sólo supone «el pago de favores a los empresarios», precisó.
La secretaria general adjunta de ELA explicó que «la mayor parte de lo recaudado en el Impuesto de Sociedades en 2008 corresponde a la liquidación de 2007, año en que no hubo crisis y los incrementos de los beneficios empresariales fueron elevados en el conjunto de la actividad económica». Estimó que es necesaria la lucha contra el fraude fiscal, así como «revertir las reformas fiscales aplicadas en los últimos años».
Muñoa reconoció que «las haciendas forales siguen insistiendo en un modelo totalmente injusto a nivel social, con la eliminación del Impuesto de Patrimonio o con la reducción del Impuesto sobre Sociedades». Reconoció que el Concierto Económico sólo ha servido «para favorecer a las rentas de capital, no para mejorar ni la recaudación ni las rentas de trabajo que, al final, son las que más tributan». ELA sostiene, por ello, que esta política fiscal que están aplicando las haciendas forales con la bendición del Gobierno de Lakua es «totalmente opuesta a la necesaria en la actual coyuntura económica, en la que el sector público tiene que aumentar el gasto social ante el incremento del desempleo. Para ello necesita recursos y lo que está haciendo es precisamente eliminar sus fuentes de ingresos por la vía de la recaudación», señaló.
ELA lamentó que precisamente «quienes han generado la crisis económica debido a la desmesurada acumulación de capital sean los que están pagando menos impuestos. Es necesaria más justicia fiscal y más gasto social para hacer frente a las necesidades de las personas, que ven que con esta crisis, se quedan sin trabajo y en condiciones más precarias», precisó la secretaria general adjunta.
Cotizaciones sociales
Ante la postura actual de la patronal de pagar menos cotizaciones sociales para, como alegan, hacer frente a la crisis Mikel Noval señaló que «los empresarios son insaciables. Pretenden pagar menos cotizaciones sociales y que sean los trabajadores los que incrementen las mismas».
Añadió que «si alguien en este momento no paga impuestos son las rentas de capital, porque los trabajadores son los que más pagan. Los datos están ahí y creo que deberían de ser las instituciones públicas quienes les respondan de manera efectiva». manifestó.
El secretario de Política Social de la Ejecutiva de ELA reconoció que «los empresarios están crecidos en este momento y quieren más y más, son inagotables. El problema se encuentra en que las administraciones públicas les hacen caso», subrayó.
ELA no cuantifica el nivel de fraude existente en Hego Euskal Herria, sin embargo en otros informes ha confirmado que los trabajadores declaran unas rentas medias en torno a los 21.000 euros y las rentas empresariales y de capital, no más de 13.000 euros, lo que muestra un desajuste grave. El movimiento a favor de los derechos sociales de Euskal Herria, Elkartzen, sitúa el fraude fiscal en Araba, Bizkaia, Gipuzkoa y Nafarroa por encima de los 7.000 millones anuales. Este colectivo ha denunciado en repetidas ocasiones que la patronal y la Administración pública «van de la mano» en cuanto al «fuerte trasvase de dinero público, desde la bajada del Impuesto de Sociedades, a las reformas del IRPF, la eliminación del Impuesto de Patrimonio, permisividad ante el fraude fiscal», entre otras actuaciones en materia tributaria.
Elkartzen recuerda que «la autonomía fiscal» que han tenido las haciendas forales ha servido para reducir el pago de impuestos a las rentas altas, del 56% al 46%, mientras que en el otro extremo, entre quienes declaran menos ingresos, se pasó del 15% al 23%. «Con las rentas de capital, las de alquileres e incrementos de patrimonio, se ha pasado de tributar al máximo del 56% al fijo del 18%, como la reducción del 35% al 28% en el Impuesto de Sociedades».