SEGUNDA La Real marcó tres goles sin Abreu y Zubikarai acabó imbatido en ausencia de Bravo
La cuarta victoria seguida reivindica a toda la plantilla
Con cinco cambios de salida, un gol de Xabi Prieto premió el buen inicio y en la fase más difícil Agirretxe y Marcos sentenciaron. La victoria acerca el liderato a seis puntos tras recortar ocho en sólo veintidós días.
CASTELLÓN 0
REAL SOCIEDAD 3
Joseba ITURRIA | DONOSTIA
La Real sigue lanzada. Sumó su cuarta victoria consecutiva ante un Castellón al que pasa a aventajar en cuatro puntos y el average cuando hace cuatro jornadas estaba siete por detrás, y se mete definitivamente en la lucha por el ascenso con una demostración del valor de una plantilla cuyo mayor mérito es no arrojar nunca la toalla. Con dos jugadores básicos como Elustondo y Díaz de Zerio lesionados casi toda la temporada, Lillo se arriesgó a recibir todo tipo de críticas al introducir cinco cambios cuando más recomendable podía parecer tocar lo justo para seguir la racha. Y en Castellón se reivindicó el grupo.
Faltaba Bravo y Zubikarai volvió a quitarse los guantes sin tener que agacharse a recoger ningún balón de su portería, como ha acabado en cuatro de los cinco partidos de Liga que ha jugado. El paradón que realizó en el minuto 12 a tiro de Omar fue extraordinario. No estaba Abreu, Lillo no puso a ninguno de los otros dos delanteros de inicio, y la Real fue capaz de meter tres goles. Ya lleva nueve en los últimos cuatro triunfos, con uno solo encajado, y el equipo alcanza el equilibrio necesario. A los rivales les cuesta mucho marcar, como antes, y la Real necesita muy poco para hacerlo.
Ayer, en la primera aproximación, como en Xerez, la Real se adelantó en una jugada magistral de todo el equipo, con gran pase de Sergio y en el que el mayor mérito lo tuvo el centro perfecto de Carlos Martínez que le debe servir para coger confianza después de salir del once y de las convocatorias tras fallar en ese arte en su última aparición.
Luego la Real supo sufrir y, cuando peor pinta tenía el partido, Agirretxe y Marcos lo sentenciaron y permitieron que por tercera semana consecutiva se viviera un final con toda tranquilidad y se vea el ascenso hoy a tres puntos a espera de lo que hagan Hércules y Rayo. Y el liderato, que hace veintidós días estaba a catorce, ahora queda a seis y con el average a favor.
Confirmación de rachas
Es la grandeza del fútbol y la demostración de que, sobre todo en Segunda, las inercias que lleva cada equipo son muy importantes. La Real suma doce puntos en cuatro partidos por uno del Castellón y en Castalia se confirmaron esas trayectorias.
La Real salió muy enchufada al partido y realizó una primera jugada de auténtico lujo con la confianza que dan esos resultados. El Castellón salió sin esa fe y sólo fue capaz de realizar en todo el primer tiempo dos ocasiones por la banda derecha que tanto inquietaba. Lillo no fue ajeno a esa preocupación y entendió que el sistema utilizado en los últimos encuentros no podía servir ante un jugador de la peligrosidad de Arana por banda derecha. Volvió a la defensa de cuatro y reforzó ese carril en el plano defensivo con la entrada de Castillo y, sobre todo, de Moha por delante, que hizo una primera parte muy buena en tareas de contención. De hecho, la segunda jugada local por esa banda llegó cuando Lillo le colocó de delantero centro y pasó a Prieto a la izquierda, quizás con la esperanza de que Rafita subiera menos. Pero el lateral subió, Prieto no bajó y así dio el centro que remató Arana a un lateral. Antes, el mayor peligro local se había marchado de Castillo y su centro propició un rechace que dejó el balón suelto a Omar, que lo empalmó de cine.
Pero cuando estás en racha y tienes a un portero de los reflejos de Zubikarai ese balón no acaba en gol. Y cuando no juegas bien, porque la Real tuvo unos primeros veinte minutos muy buenos, pero luego retrasó demasiado su posición y no jugó el balón como debía, el rival ni te inquieta. Y cuando peor estaba el equipo en el segundo tiempo, encerrado en su área y sin posesión ante un Castellón que apretaba al adelantar la posición de Mario Rosas, Lillo apostó por dar entrada a Agirretxe y a los tres minutos de salir y en la primera aproximación realista marcó un gol fantástico en un remate muy complicado.
Por si al Castellón le quedaba alguna esperanza, Marcos compensó su error de una protesta que privará a la Real de su concurso el sábado y sentenciaba el partido. El equipo local no pudo ni inaugurar el marcador en su acoso a la desesperada, a pesar de disponer de dos remates de cabeza de Ulloa y Nsue.
Es una alegría porque se gana con cinco jugadores que no salían de inicio en los tres últimos partidos y un sexto como Agirretxe fue el primer cambio. Y la Real acabó el encuentro, a pesar de las bajas de Elustondo y Díaz de Zerio y la suplencia de Labaka, con diez canteranos junto a Rivas es una demostración de que se puede confiar en esta plantilla y en esta filosofía.
Pero para que este club pueda mantener esta plantilla y no se quieran ir los canteranos, lo importante es subir a Primera, algo que parecía imposible hace un mes cuando era necesario sumar doce victorias en dieciséis partidos. Conseguir ocho en doce tampoco es nada fácil y por ello la Real deberá seguir su racha el próximo sábado ante el Nastic. Son fundamentales los tres puntos, pero sobre todo lo importante es seguir esta racha porque cuando se gana un partido es más fácil volver a vencer.
La Real salió de Castellón en autobús tras el partido y tenía prevista su llegada a Zubieta a las cinco de la madrugada. Tendrá hoy jornada de descanso y mañana a las cinco de la tarde comenzará a preparar en Zubieta el partido del sábado a las 18.30 contra el Nastic en Anoeta (ETB).
Sebastián Abreu jugó los últimos doce minutos en sustitución de Forlán en la victoria conseguida por Uruguay sobre Paraguay (2-0) en Montevideo. A la hora de cerrar esta información no había comenzado el Perú-Chile, aunque se daba por segura la titularidad de Claudio Bravo.
Seis peñas de la Real -Alcocebre 07, Estrella del Norte Txuri Urdin, Mascletá de la Costera, Sueca, Valencia y Atotxako-. recibieron ayer en Castellón la Bandera del Centenario y después acudieron a Castalia para animar al equipo y para dejar ver por vez primera esas enseñas.
El juvenil de la Real ganó 1-2 a Osasuna, el primer cadete se impuso por 4-0 al Santutxu, y el infantil al Antiguoko por 6-1. Hoy el Sanse visita muy necesitado de puntos a las cinco al Racing de Ferrol, el Easo recibe a las doce al Gernika y el infantil txiki visita a las cuatro al Hernani.
Juanma Lillo salió reforzado después de una apuesta de hacer cinco cambios y jugar sin delanteros y decía que «ahora me puedo colgar medallas, pero si otras veces me parece ventajista, no lo voy a hacer. A seguir trabajando y a ver si somos capaces de ganar al Nastic. Hace cuatro semanas estaba imposible, luego dificilísimo y ahora está muy difícil, cerca del dificilísimo. Doce partidos son muchos. El año pasado llegué a falta de once y tuve la sensación, aunque sólo perdimos en dos minutos, que nunca se acababa. Todavía va a quedar tiempo para que haya vaivenes de todo tipo».
Admitía que «acertar en la primera te da ventaja ante un equipo al que no le va bien mientras que nosotros venimos en un estado de ánimo positivo. Es bueno acertar la primera, pero en 18 minutos tuvimos cuatro situaciones. La entrada del equipo ha sido buena, aunque entre medio hubo una gran parada de Eñaut que podía haber sido el empate a uno e igual el partido se va en otra dirección. Pero había que estar y Eñaut ha estado. Siempre que se gana uno va feliz para casa y cuando ves la felicidad colectiva, la de Eñaut, me hace más feliz».
En el debe de su equipo comentaba que «no hemos estado todo lo mandones con el balón que me hubiera gustado. Quería que combinaran entre los cuatro de dentro para que luego consiguiéramos combinar con los de fuera y tener el partido más manejado para poder salir, pero no conseguimos balón como queríamos con los jugadores que teníamos. La partida del segundo tiempo parecía que iba a volcarse de su lado emocionalmente y había que hacer algo. Hemos tenido la suerte de que ha entrado Imanol y la ha metido y a partir de ahí lo han interpretado bien para hacer el tercero y luego a esperar el final».
GARA