Rubén García (Caja Rural) sentenció ayer Los Tres Días de Álava con una brillante victoria en Agurain. El corredor segoviano demostró ser el más fuerte del pelotón y se presentó en solitario en la línea de meta tras atacar a 20 kilómetros a sus rivales.

La segunda etapa resultó dura con los ascensos a Opakua y Teodosia, de primera categoría, un recorrido ratonero y pestoso. En Opakua se seleccionó el pelotón delantero y antes de Teodosia se formó un grupo del que saltó Izagirre (Seguros Bilbao) para coronar primero.

Poco después le alcanzaron su compañero Morrás, Landa (Naturgas), Rubén García y Etxebarria (Bidelan-Kirolgi). Los cinco abrieron hueco, acumularon una ventaja de más de un minuto y enseguida comenzaron su particular batalla por la etapa y la vuelta.

Más que ser listo, que también, Rubén García mostró su fortaleza y nadie siguió su estela con un ataque a 18 kilómetros de la llegada. Craso error para sus rivales. Ninguno de sus cuatro perseguidores consiguió abrir hueco y sus posibilidades acabaron cuando se picaron definitivamente.

Por el contrario, Rubén García no cejó en su ritmo, aguantó, y al final abrió un hueco insalvable. Alzó los brazos y, de paso, logró el liderato, un primer puesto que no se le debe escapar ya que, además, el Caja Rural tiene un bloque muy bueno.

La tercera y última jornada, de 130 kilómetros, se disputa hoy con inicio y final en Gasteiz. El trazado no presenta dificultades montañosas.