El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero cosechó ayer su primera derrota parlamentaria en esta legislatura, que ya ha consumido casi un año, al prosperar una iniciativa del PNV. El motivo era casi una anécdota: la petición de que al menos se suprima un ministerio para reorganizar y simplificar la Administración del Estado. Pero el desenlace tiene relevancia política, dado que es la primera vez que el PNV y el PP alían sus votos para derrotar al PSOE.

En cualquier caso, en los últimos días los dirigentes del PSOE ya habían asumido que la nueva situación en Lakua les va a crear dificultades en las Cortes de Madrid, y lo aceptan como un «sacrificio» a cambio de la «estabilidad y la Constitución», según las palabras utilizadas ayer mismo por su portavoz, José Antonio Alonso, en una entrevista a Radio Euskadi.

La propuesta fue aprobada por 168 votos a favor y 165 en contra. Con ella, el PNV logra sacar adelante la propuesta de mejorar y optimizar la gestión del Ejecutivo mediante la reducción de al menos un ministerio a partir del próximo año.

Los jeltzales contaron con el apoyo de los diputados del PP pese a las advertencias del portavoz del PSOE, José Antonio Alonso, que tras este revés insistió en que la reducción de los ministerios es una competencia exclusiva del presidente del Gobierno español, por lo que no entienden esta votación como vinculante.

La situación crea contradicciones políticas a múltiples bandas, ya que si para el PNV puede resultar incómodo alinearse con el PP, también ocurre lo mismo para el partido de Mariano Rajoy. Así, Alonso recriminó al PP que para lograr una victoria «pírrica» se haya «ido de la mano» con el PNV.

Reprochó además que es una iniciativa «inconstitucional» e «ilegal», de lo que concluyó que quienes la impulsaron «no son fiables»

El PP volvió para votar

Sin embargo, la portavoz del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, argumentó que el respaldo que su partido ha dado a la iniciativa de los vascos es un ejercicio de «congruencia» puesto que ya llevaban tiempo pidiendo que hubiera menos ministerios, «y ya que se ponen, menos vicepresidencias». Aseguró que uno de los nuevos «números 2», Manuel Chaves, «no sabemos ni qué es lo que hace».

El PP puso mucho más interés que el PSOE en esta votación, pese a acarrear su derrota. Así, sus dirigentes interrumpieron una reunión decisiva en la sede de la calle Génova para ultimar las listas electorales con el fin de acudir al Congreso de los Diputados a emitir su voto. Por contra, siete diputados del PSOE, entre ellos varios ex ministros, no estaban presentes.

Los diferentes puntos de la moción del PNV, que procedía de una interpelación al Gobierno sobre la modernización y reforma de la Administración del Estado, se votaron por separado, a propuesta jeltzale.