El ambiente hierve en la antesala de la final manomanista entre Irujo y Olaizola
Todo está listo para la fiesta del manomanista. Aimar Olaizola y Juan Martínez de Irujo se medirán el domingo en Donostia en una final que culmina un campeonato irregular en el que, por ejemplo, a Olaizola sólo se le ha podido ver en un único partido. Los días previos son días de apuestas y, aunque éstas parecen decantarse claramente del lado de Irujo, una final de estas características es de todo menos previsible. Lo que sí es más que previsible es ese llenazo que presentará la grada del Atano III. Las cerca de 400 entradas que pusieron a la venta entre Aspe y Asegarce al nada módico precio de 150 euros se vendieron en un tiempo récord: apenas una hora.
Y como viene siendo habitual en las últimas citas pelotazales de máximo nivel, la gran expectación creada hizo que la elección de material reuniese ayer a un gran número de seguidores que, quizá a falta de una entrada para el domingo, quisieron palpar el ambiente previo a una final en la que, por lo que parece, volverán a primar las pelotas rápidas, muy acordes con las características de los dos pelotaris. No falta quien echa de menos material menos veloz para poder disfrutar más del espectáculo.