Lo que cambia en «Terminator Salvation» con respecto a las tres entregas anteriores de la saga es el protagonismo humano ya que, en un principio, como el propio título indicaba, era una máquina la estrella. De hecho, Arnold Schwarzenegger se hizo famoso dando vida al cyborg que viaja en el tiempo, tanto que, cuando se retiró del cine y se dedicó a la política, le rebautizaron con el apodo de «gobernator». En la nueva película, su personaje hace una reaparición especial, pero el ex actor no quiso intervenir en la filmación, así que los responsables de los efectos especiales se vieron obligados a insertar una imagen suya previa en el cuerpo de Roland Kickinger, otro forzudo austriaco que es su doble habitual. Quien tampoco no está es Stan Winston, el mago de los F/X, que murió el pasado año cuando se ocupaba de la preproducción, y a él va dedicado el filme. La gran novedad es Christian Bale, con quien cobra relieve el personaje de John Connor, líder de los humanos frente al imperio tecnológico representado por Skynet. En su aventura le acompaña el australiano Sam Worthington, llamado a convertirse en el nuevo ídolo del cine de acción, al haber sido elegido por James Cameron como actor principal de la esperada cinta de ciencia-ficción «Avatar», con la que piensa regresar al cine de éxito el creador de la saga «Terminator». El elenco cuenta además con Helena Bonham Carter, animada por su marido Tim Burton a sumarse el proyecto, ya que el cineasta es un reconocido admirador de todo lo que tenga que ver con esta historia futurista. El recién incorporado McG ha querido darle a la puesta en escena un aire apocalíptico a lo «Mad Max».