El concejal de Deportes del Ayuntamiento de Bilbo, Jon Sustatxa, mostró ayer su disconformidad con la pretensión del Bilbao Basket de disputar todos sus partidos como local en el Bizkaia Arena del BEC de Barakaldo, argumentando que este cambio sería perjudicial para la ciudad, al suponer «una pérdida económica importante tanto para el sector hostelero como para el comercio».

Sustatxa destacó «la tradicional unión entre la Villa y el Bilbao Basket», y advirtió de «el poco optimismo que despierta este posible cambio entre las y los aficionados y las peñas». Recordó asimismo «el incondicional apoyo» que el club ha tenido «tanto de su afición bilbaina como del Consistorio, que ha puesto a su entera disposición el Pabellón de La Casilla sin pedir nunca nada a cambio», y lamentó que la marcha a Barakaldo «supondría una seria pérdida de imagen para Bilbao, ya que la Villa no tendría la presencia ni en la liga ACB, ni en Europa».

Respecto a la razón esgrimida por el club -la falta de aforo en su actual sede-, el edil respondió que el futuro Palacio de los Deportes de Miribilla paliará ese déficit y que será una instalación «perfectamente adaptada a las exigencias de las competiciones internacionales».