Congreso de Eusko Alkartasuna
EA apuesta por sumar fuerzas para una mayoría abertzale y de izquierda
Los compromisarios encargados de debatir la ponencia política mantuvieron ayer el compromiso de Eusko Alkartasuna por «propiciar la unidad de acción» de fuerzas abertzales y de izquierdas para conformar una mayoría capaz de influir y gobernar. El documento de estrategia será aprobado hoy por el Congreso, y después se procederá a la elección de la nueva Ejecutiva Nacional, a cuya cabeza se colocará como secretario general Pello Urizar, concejal de Arrasate.
Iñaki IRIONDO | GASTEIZ
La primera jornada del Congreso extraordinario de Eusko Alkartasuna estuvo centrada en los debates de los estatutos y organización interna del partido y en la ponencia política; y para hoy queda la elección de la nueva Ejecutiva Nacional, que estará liderada por Pello Urizar.
Las discusiones sobre la ponencia de Estatutos, que conllevaban una significativa reorganización interna del partido, se prolongó hasta tarde. Entre otras cuestiones se planteaba la desaparición de la figura del presidente del partido, de forma que el secretario general fuera el máximo representante de la formación. Además, se creaba la figura de la comisión permanente de la Ejecutiva Nacional, formada por el secretario general, el de organización, el de política institucional y el de comunicación, que pasaban a formar una especie de núcleo duro de la dirección en permanente contacto y con importantes atribuciones y poderes.
El debate de la estrategia política fue más ágil, por cuanto las enmiendas presentadas eran también menos. En la ponencia se recoge nítidamente la apuesta de EA por poner en marcha una acumulación de fuerzas entre partidos, agentes y movimientos sociales abertzales con el objetivo de impulsar el proceso soberanista de Euskal Herria. Se habla abiertamente de la unidad de acción abertzale y de izquierda. Esta acumulación de fuerzas se considera importante no sólo por una cuestión de soberanía, sino también para impulsar actuaciones concretas para salir de la actual situación de crisis económica.
«Transacción y acuerdo»
Desde la organización del Congreso se destacó que «la transacción y el acuerdo» habían marcado los debates de ambas ponencias. Según apuntaron, «los ponentes han aceptado un alto porcentaje de las enmiendas presentadas, transaccionándolas para incluirlas en el texto final, en un contexto en el que la alta participación y el intenso debate no ha impedido que el acuerdo haya sido la nota predominante».
En el ámbito de la ponencia política, la nota hecha pública sobre los trabajos avanzados hasta las 18.30 de la tarde destacaba que «las enmiendas subrayan la apuesta de la afiliación por profundizar en la línea socialdemócrata del partido, y en la línea de lo dicho esta mañana por el vicepresidente de la formación independentista, Koldo Amezketa, por profundizar en el trabajo institucional, caminar con pasos firmes hacia la colaboración con otros partidos abertzales y la defensa inequívoca de todos los derechos humanos para todas las personas».
Campaña negativa
En cuanto a los estatutos, desde la organización apuntaron que se habían transaccionado entre ponentes y enmendantes un bloque que suponía un cuarto de las enmiendas presentadas.
Se destacó que «los compromisarios han votado a favor de fortalecer el enfoque nacional en la gestión política del partido, subrayando la importancia de la Asamblea Nacional, el máximo órgano de Eusko Alkartasuna entre congresos, formado por alrededor de 150 afiliados en representación del conjunto de la militancia».
Este reforzamiento de los órganos nacionales y la adopción de medidas disciplinarias para quienes no siguieran sus acuerdos fue uno de los teóricos puntos de fricción en el periodo precongresual con el llamado «sector crítico guipuzcoano», encabezado por Iñaki Galdos, que acabó escindiéndose hace tres semanas para crear Alkarbide.
El vicepresidente de EA, Koldo Amezketa, abrió ayer el Congreso extraordinario de su partido con duros reproches al «juego sucio» de quienes han abandonado el partido para crear Alkarbide. Además, confió en que este encuentro sirva para superar «los duros reveses» de los últimos tiempos y conseguir que EA «siga siendo un instrumento fundamental para la construcción de Euskal Herria».
Amezketa comenzó su discurso condenando el atentado de Arrigorriaga contra el mando de la «lucha antiterrorista», tras lo que el Congreso mantuvo un minuto de silencio. A su conclusión, el vicepresidente de EA -el hombre encargado de dirigir el partido desde la dimisión de Ziarreta hasta este Congreso- centró la primera parte de su intervención en censurar las «insidias» que ha recibido la dirección de Eusko Alkartasuna y aseguró que el sector encabezado por Galdos ha estado preparando la escisión durante «muchos meses». Koldo Amezketa afirmó que en cualquier partido las diferencias se deben resolver internamente y no a través de los medios de comunicación «escupiendo babas», y apuntó que las disputas internas han provocado la pérdida de confianza de la sociedad y los «malísimos» resultados electorales.
Sobre las verdaderas demandas de los críticos, Amezketa explicó que se basaban en la recuperación de la coalición con el PNV «con renuncia a cualquier otro de acuerdo con otras formaciones políticas». La otra exigencia de los críticos era que planteaban que el reparto competencial en los diversos niveles organizativos se hiciera con arreglo al actual modelo particionista de país, «algo que está en franca discrepancia con la concepción que desde su nacimiento tiene EA en relación al modelo de país», subrayó.
Amezketa destacó que EA sigue siendo un «instrumento fundamental para la construcción de Euskal Herria» desde el «escrupuloso» respeto a los derechos humanos y el rechazo a la violencia. E indicó que sus retos son «superar los reveses» y consolidar el partido para en 2011 «demostrar que somos una fuerza necesaria para conseguir la independencia».
GARA
