Un total de 333 menores ucranianos afectados por el accidente nuclear de Chernobil llegaron ayer al aeropuerto de Loiu para pasar el verano con familias de Araba, Gipuzkoa y Bizkaia, según informó la asociación Chernobil Elkartea.

La asociación en favor de los niños afectados por el desastre de Chernobil informó de que la campaña de este verano se centra en la esperanza, un valor que consideran «imprescindible en un año económico difícil» debido a la crisis financiera que azota a todo el planeta.

Desde Chernobil Elkartea aseguraron que no hay «mejor muestra de ese valor» que el hecho de que cientos de familias que residen en Araba, Gipuzkoa y Bizkaia hayan «hecho lo posible, un año más» para que 333 menores de Ucrania de los que 22 llegan por primera vez, puedan «venir a coger fuerzas y recuperarse físicamente».

La llegada del primer avión al aeropuerto vizcaíno tuvo lugar a las nueve y cinco de la mañana de ayer, mientras que el segundo vuelo tomó tierra en el herrialde en torno las ocho menos diez de la tarde.