Vale! Ya sé que muchas personas no tendrán ni idea qué quiere decir este título pero como mañana un montón de gente vamos a dirigir un mensaje clarito al PSOE y como dicho partido se dirigió a mí en inglés con su propaganda para las elecciones europeas, aprovecho para lanzarle mi claro mensaje personal en la misma lengua. Antes de que el PSOE corra en búsqueda de un diccionario inglés-euskera, decirles que el título dice, en argot inglés, «Nuklearrik? Ez, eskerrik asko!».

Mañana hay una cita ineludible en Bilbo para pedir el cierre inmediato de Garoña. La opinión social, la información técnica independiente, un análisis de economía solidaria y el sentido común exigen nuestra presencia. Y nuestra petición será clara. Nada de medias tintas. Cierre inmediato o incumplimiento de promesas. Cierre inmediato o destierro de principios democráticos. Cierre inmediato, ni dentro de dos ni de cuatro años. No queremos repeticiones de los 800.000 puestos de trabajo, ni del tristemente famoso «OTAN de entrada no». Incluso entre el colectivo de inmigrantes se ha mejorado suficientemente nuestro castellano para vislumbrar las trampas.

Creo que no quedan argumentos que pueda añadir a todo lo dicho a lo largo de los años para lograr el cierre de Garoña. Allí andan personas «expertas» indicando que lo que haga el Gobierno tiene que ser una decisión basada en criterios económicos y técnicos, y que no debe ser una decisión política. Pero lo que hay que poner sobre la mesa en ésta y en otras muchas cuestiones es que nadie tiene el monopolio sobre los criterios económicos y técnicos, ya que hoy día todo el mundo tiene muy claro que hay multitud de criterios y modelos económicos y no hay «objetividad» ni siquiera en los criterios técnicos. Hay más motivos económicos y técnicos para cerrar Garoña que para mantenerla abierta, es simplemente que dichos criterios no responden a los intereses de las grandes empresas, grandes inversores y sus correspondientes «asesores». ¿Cuándo van a bajar todos estos de sus respectivos burros y a reconocer que sus posiciones en cuanto a la aplicación de criterios económicos y técnicos son arrogantes y prepotentes? En el fondo creen que solamente ellos tienen tales criterios y que los demás no tenemos criterio económico o técnico alguno.

La sombra del dinero sobrevuela Garoña y, sea cual sea la decisión del PSOE, reflejará criterios políticos, económicos y técnicos. Se cierra o no se cierra. La gente de la calle está harta de que sean siempre los criterios de determinados intereses, no los suyos, los que se tengan en cuenta. Y ahora hay una nueva oportunidad para que un Gobierno quede fatal...

¿O no? Hay un leve destello, un último rayo de luz en el ocaso de la democracia, un brillo alrededor de la palabra Irak. Voy a hacer un acto de optimismo y voy a ver la parte llena de la botella (que alguien me preste una lupa, por favor) y al manifestarme mañana voy a pensar que ésta será otra de las escasas ocasiones en las que el pueblo gana.