Con una media de 19 aces por partido, Ivo Karlovic explota a la perfección sus condiciones físicas -mide 2,08 metros- para ser considerado como el mejor artillero, y con mucho, del circuito. El croata, que se medirá hoy ante el máximo favorito, Roger Federer, ha sido una ametralladora en las diferentes rondas que ha debido superar, con Fernando Verdasco como su última víctima propiciatoria.

Desde que arribara a Inglaterra, sus números son todavía más excepcionales. En su primer partido sumó 32 aces, 24 acumuló en segunda ronda, casi dobló con 46 en el tercer encuentro y en octavos de final ante el madrileño le endosó un total de 35. Hasta el momento, su media en Wimbledon se ha incrementado hasta los 34 aces, sin contar aquellos servicios que son casi ganadores y en los que apenas tiene que empujar la bola ante las dificultades del contrario para devolverla.

No debe extrañar, pues, que el gigantón balcánico ostente la plusmarca mundial de primeros saques vencedores en un envite, el cual, por cierto, lo perdió ante Hewitt hace un mes en Roland Garros. En aquella ocasión, Karlovic explotó su especialidad hasta conseguir nada menos que 55 aces, una marca realmente difícil de superar.

Sus singulares números se extienden también a marcas como ser el que más puntos consigue después de su primera bola (84%), el que salva más bolas de break (72%) y el que cede menos frecuentemente su servicio (91% de juegos servidos ganados por él).

Y estas cifras, que datan de antes de su participación en el torneo en hierba por excelencia, no han hecho sino mejorar en Londres, donde está llegando a la cumbre de su arte, quizás primitivo, pero eficaz. En cuatro partidos no ha permitido ni un sólo break y sus tres últimos adversarios no tuvieron siquiera oportunidad de intentarlo.

Guerra Fría en semifinales

Como si fuera una retrospectiva de la Guerra Fría vivida en décadas pasadas, Rusia y Estados Unidos pelearán por colocar a sus mejores tenistas en la final de Wimbledon. Dinara Safina, número uno del mundo, y Elena Dementieva tratarán de evitar que se repita la final del año pasado, en la que se midieron las hermanas Williams, con triunfo final para la mayor de ellas.

La actual campeona, Venus, se deshizo con facilidad de Agnieszka Radwnaska (6-1 y 6-2) en poco más de una hora, mientras que Serena hizo lo propio con Victoria Azarenka. Por su parte, Safina tuvo que sobreponerse a un mal comienzo para derrotar a Sabine Lisicki (6-7, 6-4 y 6-1), y Dementieva acabó con la sorpresa del torneo, la italiana Francesca Schiavone (6-2 y 6-2).