Sergio LABAYEN Periodista

Con estos resultados, Mujica ha salvado el penúltimo escollo en su carrera hacia la Presidencia del país, en la que se enfrentará con Luis Alberto Lacalle, del Partido Nacional, y Pedro Bordaberry, del Partido Colorado, ambas formaciones de derechas.

Si bien Mujica parte como favorito en todas las encuestas, el Partido Nacional parece aumentar sus apoyos y podría impedir la mayoría absoluta del Frente Amplio, con lo que se iría a una segunda vuelta, un cara a cara Mujica-Lacalle, izquierda-derecha, de resultado incierto.

«Sostener el cambio»

«Ahora -anunció Mujica tras conocer su victoria- va a empezar la lucha por sostener el proceso de cambio que el compañero Tabaré Vázquez inició en este país, por afirmar, por hacer irreversibles ciertos cambios sustantivos. Tenemos que recordar que tuvo que llegar el Frente al Fobierno para descubrir que había ojos que no podían ver, y que podían ver con una simple operación, que había personas que no tenían acceso a la salud, y que ahora la tienen. Tuvo que llegar el Frente Amplio para acordarse de que había gente que había quedado colgada en el 2002 (cuando el país vivió una tremenda crisis económica) y no tenían para comer un guiso, y nos trataron de asistencialistas».

Mujica continuó diciendo que «los últimos 30 años de neoliberalismo quedó una sociedad recortada y que este Gobierno todavía no pudo sutu- rar, y ésa es una de las tareas que queda por delante».

El candidato dijo saber «qué represento». «Soy unos votos de más, sé lo que represento dentro del Frente y en esta sociedad, que ha construido arquetipos, y sé que el mundo está cambiando porque hay un negro que es presidente de Estados Unidos, está Lula en Brasil y hay un indio en Bolivia. Que el mundo sepa que represento a los que vienen de abajo. Pero sé que nadie es más que nadie», concluyó, llamando a la unidad de todos los frenteamplistas en pos del triunfo en octubre.

Líder guerrillero

La victoria de Mujica en las internas del Frente Amplio reafirma la supremacía del MPP dentro de la izquierda uruguaya. El Movimiento de Participación Popular es el heredero político del MLN-Tupamaros, la guerrilla que operó en el país en los años 60 y 70. Tras el final de la dictadura, en 1985, los tupamaros se disolvieron y fundaron el MPP, que entró a formar parte del Frente Amplio, una amplia coalición de centro izquierda.

Pepe Mujica fue un importante dirigente tupamaro. Detenido y torturado por los militares uruguayos, pasó catorce años recluido en una celda de máxima seguridad en unas condiciones terribles, formando parte del grupo de líderes del MLN conocidos como «los rehenes», entre los que se encontraba Eleuterio Fernández Huidobro, también senador por el Frente Amplio, y el fundador de la guerrilla Raúl Sendic.

Mujica fue liberado en 1985 y se convirtió en el líder natural del MPP. Desde entonces, su popularidad no ha dejado de crecer debido a su peculiar carácter, directo y muy cercano al pueblo. En el Gobierno de Tabaré Vázquez ha sido Ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca.