Txurruka se metió en la fuga buena, pero ningún vasco entró en el primer grupo y Astarloza y Menchov perdieron un minuto
Hushovd se impone ante un pueblo catalán excepcional
El noruego dio al nuevo Cervélo su primera victoria en el Tour y logró su séptima en las últimas ocho ediciones de la prueba al ganar al sprint a Freire en el repecho del estadio olímpico de Montjuic. Catalunya se volcó con su etapa y trasmitió al mundo su identidad propia.
Joseba ITURRIA | BARCELONA
Thör Hushovd logró la primera victoria del Cervélo en el Tour al imponerse en el sprint en el repecho del estadio Olímpico de Montjuic tras una auténtica exhibición del pueblo catalán, que salió a las calles con banderas amarillas y sus senyeras para dar el mayor colorido que ha tenido la prueba hasta ahora y para demostrar al mundo que Catalunya tiene una identidad propia.
La multitud de senyeras que se vieron por todo el recorrido y las pocas banderas españolas trasmitieron al mundo que el Tour no entró ayer en España, sino que siguió en Catalunya tras el final del día anterior en Perpinyà. «Catalonia is not Spain», fue el lema elegido para trasmitir ese mensaje desde la ruta. Y los catalanes se volcaron con el Tour. El millón de euros que costó a Barcelona tener su etapa ha sido un éxito por la movilización popular y por la imagen que trasmitió al mundo.
Ni la lluvia impidió la presencia masiva de catalanes. Sí provocó, por contra, que se produjeran muchas caídas en la parte final y que se rompiera el pelotón. Ningún vasco llegó en el primer grupo -Arrieta y Zubeldia fueron los primeros en llegar a 50 segundos- y buena parte del gran trabajo de Euskaltel en las cronos se perdió ayer al ceder Astarloza más de un minuto. Un tiempo parecido perdió Menchov, que como su Rabobank no levanta cabeza. La de ayer era la oportunidad para Freire de lograr una victoria con la que compensar los cinco minutos que lleva perdidos el ruso de Gorraiz y la retirada de Gesink y no la aprovecharon.
Y eso que Flecha realizó un gran trabajo para su líder y para anular la exhibición de un David Millar que, como todo el Garmin, corría en casa. Siete de los nueve integrantes del equipo del Tour viven en Girona y el escocés realizó un etapón.
Entró en la fuga del día con Auge (Cofidis) y Sylvain Chavanel (Quick Step). Luego un sobresaliente Amets Txurruka (Euskaltel), fiel a su casta y combatividad, conseguía empalmar con ellos. Pero Astana no quería que el escocés, que estaba en la general a poco más de un minuto, cogiera el liderato y trabajó duro por detrás para impedir que la escapada cogiera tiempo.
Pese a su trabajo y al de los equipos que aspiraban a ganar en Montjuic, Millar, que atacó en el último puerto y realizó una exhibición como en la crono colectiva, aguantó en cabeza hasta el último kilómetro, cuando el repecho final le impidió sumar la victoria que mereció.
La lluvia y el fuerte ritmo de la etapa provocaron caídas y que el pelotón llegara muy justo al repecho, en el que Hushovd fue el más fuerte. Luego en meta se mostraba feliz por cumplir su objetivo y el del Cervélo de ganar una etapa en la primera semana antes de llegar al terreno preferido de Carlos Sastre.
Unos Pirineos suavizados
Claro que ni el abulense ni los demás escaladores tendrán muchas opciones en Pirineos para sacar diferencias. El de hoy en Ordino Arcalis es el único final en alto -en la etapa de mañana el último puerto, que no es duro, está a 44 kilómetros de meta y en la del domingo el Tourmalet queda a 70 de Tarbes- y además no se llega hasta arriba, cuando era ahí donde se podían hacer diferencias. Sólo se recorren sus primeros 10,6 kilómetros y la dureza se limita al 8,5 del cuarto y al 10% del último.
Su pendiente media es del 7,1%, la misma que tiene el puerto de Primera de Serra Seca que los ciclistas superarán a 97 de meta. Por eso lo previsible es que haya una fuga que pueda llegar si no hay hombres importantes y que en los últimos kilómetros algún escalador lo intenten, pero sin margen para sacar demasiadas diferencias. Contador dio a entender que responderá a los ataques y la incógnita estará en la táctica de Astana, que puede buscar el liderato con Armstrong o Contador.
Los ciclistas disputan hoy su primera etapa de alta montaña, que presenta un puerto de Primera, el col de Serra Seca con 7,7 kilómetros al 7,1% de pendiente media, la misma que promedian los 10,6 primeros kilómetros de la subida a Arcalis.