«Nuestros expertos han evaluado los progresos realizados por la ARYM [acrónimo de Macedonia], Montenegro y Serbia y podemos proponer hoy la supresión de [la obligación de] visados a partir de 2010». declaró el comisario para Inmigración, Jaques Barrot.

Las condiciones exigidas incluyen la puesta en marcha de pasaportes biométricos, el refuerzo en el control de las fronteras, la lucha contra la corrupción y el crimen organizado. La propuesta debe ser avalada ahora por los ministros de Interior de los Veintisiete.

Barrot aseguró que la de ayer fue «una jornada histórica en nuestra relación con los Balcanes Occidentales». Olli Rehn, comisario de Ampliación, coincidió en hablar de un «gran día». «Sabemos de la importancia de esta decisión para los países concernidos», añadió. Por contra, Bruselas no ha propuesto extender esta medida a Albania y a Bosnia-Herzegovina al concluir que no habrían realizado suficientes progresos, sobre todo en materia de pasaportes.

Diferencia de trato

Esta distinción en el trato ha dejado un sabor amargo justo cuando se cumplen diez años de los bombardeos de la OTAN en plena ofensiva serbia contra los albaneses de Kosovo y en el decimocuarto aniversario de la masacre de Srebrenica.

«La decisión de la Comisión de excluir a Bosnia-Herzegovina de la liberalización de visados suma el insulto a la ofensa a la gente que fue la que más sufrió en la guerra que asoló esa región hace 20 años», denunció el copresidente de los Verdes en el Parlamento de Estrasburgo, Daniel Cohn-Bendit. El gesto hacia Belgrado supone que los serbios de Bosnia podrán viajar libremente por el territorio de la UE con sus pasaportes serbios. Por contra, los bosnios deberán obtener un visado. Para más inri, los croatas de Bosnia viajan también libremente por tierras comunitarias gracias a los pasaportes que les otorga Zagreb.

«Error político increíble»

El antiguo alto representante internacional y de la UE en Bosnia, Christian Schwarz-Schilling, no se mordió la lengua y califica la decisión de «error político increíble». «Bosnia está como está porque fue víctima de la agresión serbia, que supuso el peor genocidio cometido en Europa desde la Segunda Guerra Mundial (...) Y hete ahí que la Comisión decide que los serbios podrán viajar libremente, pero no los ciudadanos de Bosnia-Herzegovina o Kosovo», denunció en entrevista al diario alemán «Bild Zeitung».