Kurdistán Sur celebró ayer elecciones presidenciales y parlamentarias en una jornada marcada por la «buena participa- ción» -el 78,5%, según la comisión electoral- y por la ausencia de incidentes, en un momento muy delicado en su relación con el Gobierno iraquí.

Los colegios electorales abrieron a las 8.00 y cerraron a las 19.00, una hora más tarde de lo previsto, para permitir a los electores que esperaban en los centros de votación que ejercieran su derecho a voto.

La Comisión Superior Electoral subrayó la casi total ausencia de incidentes durante la jornada. Una de las irregularidades registradas la protagonizó, precisamente, el actual presidente de la región autónoma, Massud Barzani, que celebró una rueda de prensa dentro del colegio electoral de la ciudad de Erbil donde depositó su voto.

Los votantes, que introdujeron las papeletas en urnas de cristal y selladas para evitar el fraude, imprimieron sus huellas dactilares con el objetivo de favorecer la transparencia. Un requisito con el que también tuvieron que cumplir el propio Massud Barzani y el presidente de Irak, Yalal Talabani.