No conoce la derrota en pretemporada y su juego va ganando enteros
Como el buen vino, el equipo va ganando cuerpo con el tiempo
Las expectativas invitan al optimismo en una inminente campaña en la que el bloque rojillo configurado tras el exitoso año europeo podría comenzar a dar ciertas alegrías a una parroquia que sólo ha vivido de sobresaltos en las dos últimas temporadas disputadas.
Natxo MATXIN
Después de dos temporadas con la soga al cuello y los aficionados con el corazón en un puño, cualquier dato es suficiente para ilusionar a la parroquia rojilla. Y la pretemporada que firman de momento los de Cama- cho está aportando esa dosis de esperanza tan deseada por la grada, confiada en que sea el preámbulo y la base de una inminente campaña que traiga consigo menos disgustos y más satisfacciones.
Quienes ven, por contra, el vaso medio vacío podrían argumentar que los rivales hasta ahora lidiados no son significativos, pero el buen fútbol visto en la primera parte del sábado contra el Parma, un recién ascendido a la Seria A italiana, y además en su campo, invita al optimismo y a creer en la idea de que el bloque rojillo que se ha ido fraguando tras el exitoso año europeo empieza a dar sus apetecidos frutos.
Para empezar, su técnico, José Antonio Camacho, parece haber dado con la tecla para que el once osasunista recobre la idea de jugar con dos delanteros. La consolidación en el puesto de media punta de Pandiani -donde ya jugó con el Deportivo y el Mallorca-, un futbolista al que dicha ubicación no le resta eficacia goleadora -no ha anotado hasta ahora, pero es uno de los más destacados en los entrenamientos- y sí aporta trabajo en apoyo a los pivotes y enganche con el ataque es uno de los aspectos positivos y que se prevé de enorme influencia en el Osasuna de la 2009-10.
Su compenetración con Aranda va a resultar clave para mejorar el maltrecho rendimiento ofensivo de los últimos tiempos. De momento, la dupla de rapados ya está mostrando los dientes a las defensas rivales, con quienes tienen sus más y sus menos en cada partido. No permitir que el oponente salga tranquilamente con el balón controlado desde su área es una de las tareas que deben asumir.
Un tándem al que acecha, a base de goles, uno de los renegados de la plantilla. Javier Portillo mojó en Huesca y volvió a hacerlo en tierras italianas, reivindicándose como el goleador que fue en el pasado y que en Osasuna todavía no se ha visto. El de Aranjuez fue la última gran apuesta económica y deportiva de los rojillos, sin que haya devuelto la confianza hasta el momento. Pero también a Pandiani se le daba por perdido y la liga pasada fue el máximo realizador rojillo, con 11 dianas.
Masoud, desequilibrante
En cualquier caso, el mayor desafío que parece haber emprendido el entrenador murciano es conseguir hacer un jugador válido para el fútbol europeo al iraní Masoud. El reto ya lo anunció la pasada temporada y ésta parece tenerle reservada una importante misión en el carril izquierdo. De momento, el habilidoso futbolista está respondiendo con creces y acierto.
También acumula dos tantos en su haber y el sábado abrió la cuenta en el Ennio Tardini en un gol, del que gran parte del mérito recae sobre Juanfran, el fijo en el otro interior, después de una magnífica jugada individual del de Crevillente. Lo dicho, Osasuna ilusiona y este jueves tendrá otra nueva prueba para nota contra la Lazio.
La Real se hizo con el Trofeo Teide al imponerse en la final al Tenerife (0-1), recién ascendido a Primera, gracias al solitario gol que consiguió en la segunda parte el colombiano Estrada, quien comienza a confirmar con goles la calidad que atesora.
Un triunfo de especial valor por la calidad del rival y por disputarse lejos de Donostia, después de que los guipuzcoanos se hayan medido hasta ahora a rivales de menor entidad. El técnico txuri urdin, Martín Lasarte, alineó de inicio a Bravo, Estrada, Mikel González, Labaka, De la Bella, Rivas, Elustondo, Xabi Prieto, Zurutuza, Estrada y Viguera en su tercer amistoso de la presente pretemporada.
Con esta trayectoria y el gran apoyo que recibirá desde la grada, la Real deberá plasmar en hechos sus opciones por regresar a la máxima categoría. Los txuri urdines serán, después del Betis, el equipo con mayor masa social de la categoría, ya que cerca de 19.000 aficionados han renovado su abono con el club guipuzcano.
Ello refleja la fidelidad de una hinchada, que sigue ahí pese a los malos momentos por los que pasa la escuadra donostiarra, no sin reconocer que se ha producido una pérdida de 10.000 socios desde hace siete temporadas, cuando se superó la cifra de los 28.000 abonados.
También la ilusión se ha reflejado en las renovaciones de los aficionados del Real Unión, pero los de Irun tienen el inconveniente de que las dimensiones de sus gradas no permiten la entrada de más de 5.000 personas. GARA
Antes de que Osasuna dispute su compromiso más exigente contra la Lazio el jueves, los rojillos se medirán hoy al Isola, de la cuarta división, a las 18.30 en el campo del hotel donde están concentrados.
Camacho llamó a los jugadores del filial Alan Baró y Dani Palacios, que ya están en Roma, para cubrir las ausencias de Monreal, Nekounam, Masoud y Vadocz por sus compromisos internacionales.