GARA > Idatzia > Kirolak > Osasuna

Los rojillos sumaron un punto ante un rival complicado

Sensación ciclotímica generalizada

El debut liguero de los de Camacho confirmó la montaña rusa de su juego, otra vez con dos periodos diametralmente opuestos, pero con margen para la esperanza cuando alcancen el tono físico obligado de la competición. Un pletórico Pandiani hizo su primer gol.

p030_f01_285x164.jpg

OSASUNA 1

VILLARREAL 1

Natxo MATXIN | IRUÑEA

Con una sensación ciclotímica se marchó la afición rojilla de El Sadar en el debut liguero de su equipo. Al igual que ocurriera en su presentación oficial hace una semana, Osasuna ofreció dos caras diametralmente opuestas que, por un lado, abrigan esperanzas y, por otro, prolongan las dudas de la campaña pasada.

En esta ocasión sólo varió el orden del juego protagonizado. Si ante el Deportivo los de Camacho reaccionaron tras el paso por vestuarios, ayer fue justo al contrario. Dieron un recital en la primera parte y se hundieron en la reanudación. El calor y la lógica falta de ritmo competitivo hicieron estragos entre el once navarro, que casi acabó entregando la cuchara ante el Villarreal de Ernesto Valverde.

Sólo las certeras intervenciones de Ricardo -sigue demostrando que los mano a mano son su asignatura preferida- evitaron una derrota que hubiera resultado injusta tras lo visto en los primeros cuarenta y cinco minutos, pero que bien pudiera haberse producido si los castellonenses, tampoco muy sobrados, hubieran estado algo más acertados.

El botón de muestra de lo dicho es que los de Camacho no generaron ni una sola ocasión de peligro durante toda la segunda mitad, mientras que el submarino amarillo se hinchó a rondar la portería osasunista, con Nilmar y Pires -el francés entró desde el banquillo- en el tramo final, con hasta cinco claros lances en el último cuarto de hora. Ambos futbolistas pusieron a prueba los reflejos del guardameta madrileño, que se asienta como titular.

En esa montaña rusa que fue el enfrentamiento contra el Villarreal, la escuadra navarra hizo vibrar a los suyos por el espíritu con el que saltaron al césped. Una primera parte que divirtió al público, con goles, momentos de buen fútbol y, sobre todo, una actitud aguerrida dispuesta a demostrar quién jugaba en casa.

Una disposición que ni siquiera se vio quebrantada por el gol de rebote del rival, precisamente cuando mejor estaban sobre el campo los locales. La rápida reacción permitió que, a la postre, al menos uno de los puntos se quedaran en Iruñea.

Por la derecha

Los rojillos le hicieron pasarlas canutas a Capdevila. Juanfran, Aranda y Azpilicueta probaron a horadar la parcela del internacional y lo hicieron con acierto, aunque ello no se materializara en el marcador. En el otro carril, por contra, no había noticias de Masoud. El iraní no fue el de la pretemporada; lento y sin chispa, naufragó con desánimo por esa banda y se ganó a pulso la sustitución.

Osasuna no dejaba pensar a la zona de creación villarrealense, que se vio más fortalecida de talento con la obligada entrada de Ibagaza en el minuto 25 por la lesión muscular de un Marcos Senna que ya había estado renqueante a lo largo de la semana. Puñal y Nekounam, con la ayuda del incansable Pandiani -recibió el trofeo al jugador más carismático de la pasada temporada-, ahogaban a los Eguren, Rossi, Cazorla o Cani.

Eso sí, el Villarreal se hartaba de botar saques de esquina -hasta siete en la primera mitad- porque le sobra calidad y con un balón largo buscando el desmarque de un interesantísimo Nilmar le basta para provocar el máximo daño en las líneas enemigas. En estrategia los de Camacho sufrieron una barbaridad, a Ricardo le costó horrores salir de debajo de los palos y los visitantes se imponían en la gran mayoría de los balones aéreos, en especial en el que tuvo que sacar Monreal en la misma línea de gol.

Pero los anfitriones hilvanaron más y mejor en este periodo, Aranda comenzó a mostrar algunos de sus destellos y las arrancadas de Juanfran, intermitente aunque mejor dosificado que en otras ocasiones, permitieron fases de júbilo entre la parroquia rojilla, que se quedó con las ganas de seguir saboreando las mismas sensaciones después del descanso.

Toda impresión subjetiva está sujeta a su correspondiente porcentaje de error, pero por lo visto en la jornada de ayer, el Osasuna de la 2009-10, una vez alcance el tono físico obligado de la competición, parece preparado para dar más alegrías que disgustos en este nuevo e ilusionante curso.

Camacho: «El punto se puede considerar bueno ante un equipo como el Villarreal»

El técnico rojillo, José Antonio Camcho, se mostró conforme con el empate cosechado contra el Villarreal, un punto que se puede considerar «bueno» dada la entidad del oponente y tal y como discurrió el choque contra los castellonenses. «Era más o menos lo que esperábamos, un partido muy difícil con unos jugadores enfrente muy buenos y con mucha calidad que nos iban a poner en problemas», admitió el preparador murciano de Osasuna.

Las sensaciones que le transmitieron los suyos, especialmente durante la primera mitad, contentaron al míster osasunista, quien reconoció que «hemos apretado demasiado hasta los 70 minutos y cuando hemos dado un paso atrás, ellos tienen mucha calidad y generan una tela de araña en la que es muy difícil quitarles el balón», señaló en referencia al bajón fisico que el equipo sufrió tras el paso por vestuarios.

En cualquier caso, Osasuna ha ganado enteros en algunos aspectos del juego, según resaltó Camacho, en especial en lo concerniente al aspecto ofensivo. «Arriba tenemos mucho peligro y vamos a ser un equipo difícil. La muestra es el gol que nos han metido, que ha necesitado de un rebote para que el balón entrara en las redes», reflejó el míster rojillo.

Ernesto Valverde, entrenador del Villarreal, también alabó las maneras rojillas. «Han comenzado muy bien, obligándonos a entrar en segundas jugadas de manera continua y ganándonos en la presión. No hicimos la lectura correcta del partido, queríamos jugar desde atrás y perdíamos siempre el balón», comentó el Txingurri. Tras el descanso varió el escenario: «No hubo ni una ocasión por su parte y tuvimos muchas oportunidades para ganar los tres puntos».N.M.

El Día de las Peñas, con la visita del Sevilla

El Día de las Peñas Osasunistas se celebrará coincidiendo con la visita del Sevilla -20 de septiembre, ó 19, si se adelanta el partido-, que se desarrollará en el frontón cubierto de Cordovilla. Entre las actividades, habrá una comida popular que tendrá un coste de 25 euros. Para apuntarse, cada peñista deberá contactar con el presidente de su asociación.

La plantilla disfrutará de su descanso mañana

Una vez comenzada la competición oficial, Osasuna regresará a su habitual calendario de trabajo. Así, la plantilla rojilla disfrutará de su habitual descanso semanal mañana, mientras que hoy se recuperarán del esfuerzo realizado. Para no perder ritmo, la escuadra navarra disputará un amistoso este viernes contra el Girondins en Capbreton.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo