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El riesgo de pobreza es superior al problema del desempleo en la OCDE

El «club de los países más desarrollados», como se conoce a la OCDE, reconoció ayer en el informe sobre el empleo que «el riesgo de pobreza es superior al riesgo del desempleo». Existe una fuerte pérdida de empleo en los 30 países que integran esta organización, pero sus gestores se han dado cuenta que sólo con crear empleo, sobre todo precario, no es suficiente para salir de la crisis económica, porque no producirá el tirón del consumo que se necesita.

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Juanjo BASTERRA

El informe anual de «Perspectivas del Empleo» de la OCDE confirma que la pobreza entre los treinta países más desarrollados del mundo sigue una línea ascendente entre quienes no tienen un empleo, pero también entre los ocupados debido a la baja calidad de los contratos y cortos salarios. Tal es así que el informe, firmado por John P. Martin, director de Empleo, Trabajo y Asuntos Sociales, constata que «el riesgo de pobreza es superior al riesgo de desempleo en la mayoría de los países».

La tasa de pobreza global en la OCDE se encuentra en un 10% de la población activa, pero alcanza el 16% en Estados Unidos, que sólo se ve superado por Turquía y México con tasas por encima del 18%, mientras que en el Estado español la pobreza rebasa el 14% y el 8%, en el Estado francés. Sólo los cuatro países nórdicos cuentan con una tasa de pobreza inferior al 6%.

El largo período de crecimiento económico y de la actividad no ha servido para su retroceso, a pesar de que se creó mucho empleo en el denominado «club de los países más desarrollados» del planeta. La ocupación, como muestran los resultados del informe, fue muy precaria en su mayor parte, lo que ha impedido a los trabajadores salir de la pobreza y otros han caído en la en la misma por el incremento «exagerado» del paro, como explicó ayer el director general de la OCDE, Angel Gurría.

Por eso, el informe de la organización internacional, que tiene su sede en París, determina que en el contexto actual de disminución de la economía, «lo único que se puede esperar es un aumento de la pobreza», dado que la degradación de la situación económica global está produciendo «pérdidas importantes de empleo en la mayoría de los países miembros».

En este sentido, destaca que en países como Australia, Canadá, Irlanda, Corea y Estados Unidos «más de la mitad de los individuos que viven en hogares en paro son pobres, contra un 37% de la media de la OCDE». En el Estado español,se encuentra en el 48% y otro 22% corresponde al Estado francés.

El estudio señala también que el riesgo de caer en la pobreza entre personas con trabajo es significativamente alto. «Sí es cierto que el empleo reduce significativamente el riesgo de pobreza, pero se mantiene un 7% de las personas pobres, a pesar de vivir en hogares en los cuáles al menos una persona trabaja».

Por lo que la OCDE indica que «los trabajadores pobres representan más del 60% del conjunto de la población sin recursos en edad activa, aunque esa proporción alcanza al 80% en países como Grecia, Islandia, Japón, Luxemburgo, México, Portugal y Turquía». En este sentido, advierte de que «para la mayoría de los trabajadores pobres, el subempleo es un problema principal. Por término medio, en los 21 paises europeos que forman parte de la OCDE, un poco más del 20% de los trabajadores pobres trabaja a jornada completa todo el año y un 70% lo hace seis meses o menos».

Por el contrario, advierte que más de la mitad de los individuos que viven en «un hogar no pobre» trabajan en jornada completa todo el año.

La gravedad de la situación se palía en parte, a juicio del organismo internacional, por las transferencias sociales públicas.

57 millones de parados y el Estado español lidera la destrucción

Angel Gurría, secretario general de la OCDE, pronosticó ayer que en 2010 se alcanzará el 10% de paro de media entre los treinta países, a pesar de que en la actualidad se encuentra en el 8,5%. Supondrá que se alcanzará la cifra de 57 millones de parados.

Estos datos echan un nuevo jarro de agua fría en torno a una previsible recuperación económica, porque la destrucción de empleo del mercado laboral aumentará. De hecho, el Estado español encabezará el desempleo en los próximos meses. La OCDE confirma que terminará 2010 con una tasa de desempleo del 19,8%, es decir el doble de la media de los países de esa organización.

El informe detalla que desde el inicio de la crisis en 2007, en el Estado español ha aumentado el desempleo en 2,2 millones de personas, pero la destrucción de puestos de trabajo llegará a los 2,7 millones. Sólo Irlanda se mueve en unos parámetros altos, ya que llegará el desempleo al 15,1% este próximo año, lo que supondrá 232.000 parados más desde el inicio de la crisis económica. Ante esta situación, Gurría reconoció que «la recuperación rápida del empleo es una preocupación global». Reconoció que las medidas de inyección económica apenas han tenido «un impacto moderado», dado que en el caso español «sin las medidas de estímulo, la tasa de paro habría aumentado en un 1,5% más».

Pero, el secretario general de la OCDE llamó la atención porque «se necesitan medidas intrépidas para abordar el alto desempleo, debido a sus costes sociales y económicos». Reclamó, además, que se «limiten» los despidos y, por otro lado, que mejoren las condiciones de trabajo. J. BASTERRA

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