El Comité Olímpico Internacional (COI) elegirá mañana la ciudad que albergará los Juegos Olímpicos de 2016. Chicago, Madrid, Rio de Janeiro y Tokio son las cuatro urbes que optan a acoger la cita olímpica, y en el Bella Center de Copenhage tendrán su última oportunidad para convencer a la asamblea del COI. Será el punto final a un largo proceso de elección y que tiene algunas peculiaridades que conviene tener en cuenta.

La asamblea encargada de la elección está compuesta por 106 personas, pero sólo 97 votarán en primera ronda. Como viene siendo habitual, el presidente, Jacques Rogge, no lo hará para dar ejemplo de neutralidad. Tampoco votará el surcoreano Kun Hee Lee, suspendido por haber sido condenado en su país por irregularidades en su etapa como presidente de Samsung. Y tampoco los siete miembros de los países implicados.

La composición de esa asamblea ha sido históricamente bastante polémica. Por ejemplo, de los 106 miembros, 47 son europeos, 22 asiáticos, 18 americanos, 15 africanos y 4 de Oceanía. Además, Italia y Suiza son los países más representados en la asamblea del COI, con cinco votos cada uno. Les siguen Rusia, Australia, Gran Bretaña, Alemania y Suecia, que tienen tres.

El propio presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, criticó en el mes de junio el sistema de elección, al admitir que la candidatura de Rio iba a entrar en un «embate político». Lula recordaba entonces que «un país como Italia cuenta con cinco delegados, mientras que toda América del Sur tiene sólo cuatro» y consideró que el sistema favorece «a los países ricos». No hace falta ser muy observador para darse cuenta de que África nunca ha acogido unos Juegos y de que Rio aspira a ser la primera ciudad sudamericana en hacerlo.

Jornada maratoniana

La votación se realiza en diferentes rondas y para salir elegido se necesita la mayoría absoluta en alguna de ellas. Si ninguna ciudad consigue esa cifra -49 votos en la primera ronda-, se elimina a la que menos apoyo haya tenido y se vuelve a votar, permitiendo participar a los miembros del país descartado. Si se confirma la igualdad pronosticada, lo más probable es que se llegue a una última votación con dos ciudades en liza. Exceptuando el caso de Beijing, que arrasó en la segunda ronda, así ha ocurrido en el resto de las elecciones más recientes: Londres ganó a París por 54-50, Atenas a Roma por 66-41, Sydney a Beijing por 45-43 y Atlanta a Atenas por 51-35.

La maratoniana jornada comenzará a las 8.45 con la presentación de la candidatura de Chicago. Tokio y Rio de Janeiro harán lo mismo durante la mañana, y Madrid cerrará el cuarteto después de comer, a las 14.45. Dependiendo de la duración de los actos protocolarios, la votación comenzará entre las 16.00 y 16.30. Por último, Jacques Rogge pronunciará el nombre de la ciudad ganadora en un acto previsto para las 18.30 y cerrará la jornada con una conferencia conjunta entre el COI y la ciudad ganadora.

Aunque la presentación del último día ante el Comité Olímpico no suele ser el elemento clave, las distintas candidaturas pondrán toda la carne en el asador y no faltarán varias caras conocidas del deporte mundial en sus actos. No obstante, la mayoría de los títulares se los están llevando las autoridades de cada país, con Barack y Michelle Obama a la cabeza. Y es que cualquier detalle puede influir.