Lasarte deberá decidir si da continuidad al once y al esquema del pasado domingo con la posible entrada de Zurutuza por Sergio
El primer test ante un candidato
Los blanquiazules quieren confirmar en su primer enfrentamiento con un aspirante al ascenso la mejoría mostrada en el último partido.
NUMANCIA-R. SOCIEDAD
Joseba ITURRIA |
Numancia y Real se ponen a prueba en su primer duelo con otro de los principales candidatos al ascenso. Aunque es pronto para definir los objetivos de cada uno, había seis equipos que partían como favoritos -los tres que descendieron de Primera y los tres que estuvieron más cerca del ascenso el año pasado- y los primeros partidos han confirmado los pronósticos y todos están en las primeras posiciones detrás del sorprendente Cartagena, al que por su comienzo y por el dinero que ha gastado hay que incluirlo por ahora entre los rivales a temer.
Numancia y Real han comenzado bastante bien a nivel de resultados y la de esta tarde será en ambos casos una especie de prueba del algodón para empezar a calibrar su nivel competitivo ante los equipos más fuertes. Los de Arkonada han comenzado incluso mejor, ya que además de tener un punto más han jugado tres de sus cinco partidos fuera, pero la tendencia de los blanquiazules es mejor.
Los sorianos ganaron los dos primeros partidos y se distanciaron en cuatro puntos de los realistas, pero en los dos siguientes sólo sumaron un punto en casa a última hora ante el Murcia -aunque la derrota en Las Palmas fuera injusta- y ganaron el pasado domingo en Tarragona con un gol en el minuto 89 de Kike Sola.
La Real, por contra, ha sumado siete puntos de nueve en los tres últimos partidos y ante el Huesca, sobre todo en los 25 minutos finales, mostró una sensible mejoría conforme recupera a jugadores importantes. Habrá que ver si hoy sigue esa línea ascendente en un partido complicado porque el Numancia es un equipo muy trabajado al estilo de su entrenador y que recibe pocos goles. La duda está en saber si ante ese rival y en un campo diferente al de Anoeta, Martín Lasarte insiste con el estilo de juego del pasado domingo, en cuyo caso sería probable que Zurutuza sustituya a Sergio si su problema en el codo de la semana no supone un contratiempo. Si prefiere dar más importancia al aspecto defensivo, puede optar por la entrada de Rivas en lugar del riojano.
Los otros diez jugadores se supone que serán los mismos que comenzaron ante el Huesca porque Martín Lasarte no es un técnico al que le gusta realizar muchos cambios y además no es bueno hacerlos cuando se está en un proceso de formación de un bloque como ahora.
En ese sentido el Numancia tiene ventaja porque Gonzalo Arkonada ya estuvo en Soria hace dos temporadas y, aunque la mitad de la plantilla ha cambiado en estos dos años, el estilo y la idea de juego es la misma y así los nuevos tienen más fácil el proceso de adaptación.
Un millar de aficionados
La Real estará acompañada hoy en Los Pajaritos por un millar de aficionados que aprovecharán la cercanía de Soria para acudir a animar a su equipo en una demostración más de que los blanquiazules tienen una afición de Primera. Además, la del Numancia es muy sana y se espera que desde la mañana se viva un buen ambiente entre los aficionados de ambos equipos por mucho que el encuentro haya sido declarado de alto riesgo.
El Numancia se ha caracterizado por tener siempre a un gran número de vascos en sus filas. A su presidente Francisco Rubio, un constructor soriano que no oculta que el Athletic es su segundo club, siempre le ha gustado el fútbol vasco y ha buscado en él técnicos y jugadores con éxito. En un club que hasta 1989 no pasó de Tercera, categoría lógica para una ciudad de 40.000 habitantes -toda la provincia tiene 75.000-, cogió el cargo hace 17 años en Segunda B y desde el 97 no ha bajado de Segunda y en tres ocasiones ha ascendido a Primera. En una de ellas perdió la brújula y gastó el dinero que no tenía en fichajes para intentar mantenerse, pero aprendió -además tuvo que pagar el error con su dinero- y ha vuelto a su apuesta por el fútbol vasco en particular y del Norte de la península en general, con presupuestos muy bajos a los que saca el máximo rendimiento. Así hace dos años el presupuesto oficial que sirvió para ascender era de 4,5 millones de euros, aunque en el fútbol hay dinero que se paga y no figura en ningún lado.
Soria y el Numancia ofrecen a los vascos un ambiente bueno, sano y tranquilo, ideal para trabajar sin presión, y la cercanía de casa. En una o dos horas todos pueden ir a ver a su familia. Por eso el Numancia cada vez es más vasco en una dinámica que este año ha alcanzado su máxima expresión con trece jugadores, dos entrenadores -el tándem guipuzcoano Gonzalo Arkonada-Joserra Eizmendi- y Patxi Bedia, que salió de Arrasate para jugar en el Numancia hace muchos años y que ahora es un soriano más y sigue en el club como fisioterapeuta.
Entre los trece futbolistas vascos hay otros dos guipuzcoanos formados en la Real como Balentziaga y Barkero, pero dominan los jugadores formados en Lezama y Tajonar. De la cantera del Athletic han salido Lafuente, Felipe, Jaio, Garmendia y Goiria y en Osasuna se han formado Javier Flaño, Palacios, Nagore y Kike Sola. Dos alaveses como Mikel Álvaro e Iñigo Vélez, que comparten edad -son de 1982- y paso por el Aurrera de Gasteiz antes de una variada trayectoria, completan la relación de los trece futbolistas vascos, de los que nueve jugaron el pasado fin de semana y siete desde el inicio.
El resto son jugadores del Norte de la península menos Lago Junior (Costa de Marfil). El club y Arkonada, como explicaba ayer en GARA, buscan un tipo de futbolistas predispuestos al trabajo y con una determinada forma de ser y en ese sentido los gallegos, asturianos, aragoneses y catalanes son los elegidos para completar una plantilla muy sólida. J. I.
No hubo novedades en el último entrenamiento de ayer y Martín Lasarte ofreció la misma lista que la semana pasada con la única variación de la inclusión de Asier Riesgo como portero suplente en detrimento de Eñaut Zubikarai.
Un punto separa a Numancia (10) y Real (9). Los sorianos comenzaron con dos victorias y, tras sumar un punto en los dos partidos siguientes, ganaron la última jornada con un gol de Kike Sola en el minuto 89 en Tarragona.