MULTITUDINARIA MANIFESTACIÓN EN DONOSTIA
Nervios en el PSOE ante una respuesta que no preveía
GARA |
El nerviosismo del PSOE ante la respuesta unitaria de ayer quedó en evidencia en las airadas declaraciones en cadena de sus principales representantes tanto en Madrid como en Euskal Herria. Mientras que PP y UPyD se centraron básicamente en criticar con dureza al PNV por enviar representantes a la marcha de Donostia, desde el Gobierno del PSOE añadieron a esa crítica una curiosa reflexión, ya que Alfredo Pérez Rubalcaba se dirigió directamente a Arnaldo Otegi, al que acaban de enviar a prisión junto a cuatro independentistas más.
«Lo que tiene que hacer Otegi si quiere hacer política es romper con ETA o convencer a ETA de que deje de matar», afirmó el ministro español de Interior en una entrevista radiofónica en que justificó las detenciones y encarcelamientos de los citados militantes independentistas, además de defender el auto judicial de Baltasar Garzón.
«Lo que se demuestra en la documentación es que detrás de toda esta operación hay una estrategia de ETA, lo que llaman una estrategia político-militar, que se resume en que, según cómo vaya la cosa, pegan más o menos tiros», prosiguió Alfredo Pérez Rubalcaba.
Con la aparente intención de obstacular la participación en la manifestación de Donostia, Rubalcaba afirmó por tanto que todos los que saldrían a la calle horas después defienden esa supuesta «estrategia político-militar». Y así se lo hizo saber especialmente al PNV. Según Rubalcaba, la formación jeltzale «lo que está defendiendo en la calle es una estrategia político militar diseñada por ETA».
«Esa estrategia ya sabemos a dónde nos conduce porque los demócratas lo hemos intentado varias veces y hemos llegado a la conclusión de que no es el camino. El camino es que quienes quieran la paz se dirijan no a convencer al Estado de lo que tiene que ceder, sino a convencer a ETA de que con bombas no va a ir jamás a ningún sitio», argumentó el ministro de Interior, que hasta ahora había sostenido una intensa unidad de acción con el PNV, plasmada sobre todo en las conversaciones de Loiola de 2006.
Puso énfasis en reiterar que Otegi y sus compañeros «estaban desarrollando pura y sencillamente la estrategia de ETA», y que «es por eso por lo que van a la cárcel, no por sus ideas».
López y el sistema democrático
El vicesecretario general del PSOE y ministro de Fomento, José Blanco, también salió a la palestra para criticar a los jeltzales y señalar que «no comparto que se pueda participar en una manifestación en relación con unas personas que están tratando de reorganizar a una formación ilegalizada como es Batasuna».
El lehendakari, Patxi López, sentenció que «las formaciones políticas que se manifiestan de la mano del abertzalismo radical cuestionan el propio sistema democrático».
Fue un discurso parejo al realizado por el portavoz del PP en la CAV, Leopoldo Barreda, quien denunció en Radio Euskadi que «no es comprensible que el PNV y otras fuerzas democráticas vuelvan a salir a la calle oponiéndose a la acción de la justicia y respaldando la estrategia diseñada por ETA». Barreda se mostró desesperanzado al entender que todos los partidos que ayer se manifestaron en Donostia no han entendido las experiencias del pasado. «Les han vuelto a engañar», opinó.
El contrapunto de las formaciones españolas la ofreció ayer el coordinador federal de IU, Cayo Lara, quien criticó la detención del principal interlocutor de la izquierda abertzale, Arnaldo Otegi, e insistió en que no comparte «que se ilegalicen las ideas».
En una entrevista concedida a Radio Euskadi, el máximo dirigente de Izquierda Unida argumentó que no se puede perpetuar a la izquierda abertzale en una rueda de procesos ilegalizadores, y señaló que «no se ha ilegalizado en este país a quienes defendieron que nuestros soldados debían ir a matar gente a Irak».
El dirigente de IU se mostró convencido de que «una gran parte» de quienes ayer respaldaron a las organizaciones de la izquierda abertzale «no es gente que está por la violencia, ni por resolver los problemas matando a otras personas». «Creo que a esta gente hay que darle margen suficiente, no se les puede estar ilegalizando de esta manera, porque así no se avanza en la solución del problema de la violencia», enfatizó.
También consideró Lara que «no está suficientemente claro» qué se perseguía en la supuesta reunión en la que fue detenido Otegi junto a otros militantes independentistas, por lo que cuestionó el contenido del auto de Garzón.
«Quizá -apuntó Cayo Lara-, el camino que querían coger es el de trabajar para conseguir que ETA se acabe definitivamente. Yo me quedo con la duda razonable», apostilló el máximo mandatario de IU, tras criticar la persecución de ideas. GARA