Falange y Tradición reivindicó sus acciones en la CAV como una «bienvenida al nuevo Gobierno Regional Vascongado del Sr. López». Al lehendakari le interpelaron ayer en el Parlamento por su silencio ante esta dedicatoria, y Patxi López dijo que la pregunta ofendía y que lo que su Ejecutivo ha hecho es «no darse por aludido» por lo que dice «un grupo fascista» y «responder con toda contundencia persiguiendo esas actitudes» a través de la Ertzaintza. E insistió en que su Gobierno «actúa con diligencia y firmeza». Pues bien, o sus compañeros del Ministerio del Interior no vieron al Ejecutivo de Lakua muy preocupado por este tema o la coordinación entre la Ertzaintza -que tenía abiertas diligencias- y la Guardia Civil no funciona bien. Porque poco antes de la intervención del lehendakari en el Parlamento las detenciones estaban ya en los teletipos y ni él ni su consejero de Interior demostraron saber nada. Por lo que se ve, nadie les había informado con antelación de que iban a detener a aquellos a quienes ellos perseguían «con contundencia», «diligencia y firmeza».