El séptimo largometraje de Catherine Corsini se acaba de presentar en el Festival de Cine Europeo de Sevilla, al igual que el resto de su filmografía pasó por otros certámenes internacionales: «Los enamorados» y «La repetición» por Cannes, «Les ambitieux» por Roma, o «La nueva Eva» por la Berlinale. Fue en esta realización cuando trabajó hace diez años por primera vez con Sergi López, quien no para de interpretar en francés.

El actor catalán protagoniza este año «Le Régate», de Bernard Bellefroid; «Ricky», de François Ozon; «Les derniers jours du monde», de los hermanos Larrieu; «Regrets», de Cèdric Khan; y «Rapt!», de Lucas Belveaux. En «Partir», al igual que sucedía en «Mapa de los sonidos de Tokio», vuelve a ser irresistible para las mujeres. Él no acaba de entender porque le eligen para ese tipo de papel, pero reconoce que a veces la atracción física puede resultar irracional e inexplicable. Y su presencia en la pantalla debe tener algo de carnal, lo suficiente como para levantar pasiones salvajes.

En «Partir», Sergi López es el objeto de deseo para la mujer burguesa que encarna la inglesa Kristin Scott Thomas, una fisioterapeuta que está dispuesta a dejar su vida de familia acomodada junto a un médico por el marginal al que acaba de conocer. La situación de ruptura le pilla en un momento en el que se encuentra abierta a cambiar de rumbo, incluso recomenzado desde cero si es necesario. No duda en romper las convenciones sociales para ello, liándose con el albañil y exconvicto encargado de las obras de su nueva consulta.

El marido que no se explica las razones por las que su esposa prefiere a un don nadie es interpretado por Yvan Attal, el marido en la vida real de Charlotte Gainsbourg. El triángulo amoroso deriva hacia la crónica negra, ya que la película se abre con el sonido de un disparo que da paso a un gran flash-back para reconstruir lo ocurrido entre los tres. Catherine Corsini dice que las heroínas que le han inspirado en el diseño de su protagonista femenina son nada menos que Anna Karenina y Madame Bovary.