Maite SOROA | msoroa@gara.net
La «normalidad» y el «cambio»
Es bien conocida la ferocidad de los conversos a la hora de defender su nuevo credo. Muchas veces tanto ardor guerrero les deja, además, en ridícula postura.
Les sucede, en Euskal Herria, a muchos de los que pasaron del «no» al «sí inequívoco» a la Constitución española. Por ejemplo.
Ayer en «El Correo Español» Tonia Etxarri cantaba las excelencias de la Carta Magna españolísima y escribía melonadas como la que sigue: «Si no hubiera sido por la Constitución del 78, que puso las bases del Estado de las autonomías, el lehendakari Patxi López, como todos sus antecesores en Ajuria Enea, no estaría al frente de la comunidad que goza de mayor grado de soberanía política y financiera». En realidad Patxi López está al frente de esa comunidad porque, de manera previa, borraron del censo al 15 por ciento de la población. Todo muy democrático.
Ahora hablan del «cambio» y de la normalidad: «se trata del cambio en Euskadi, con permiso de los nacionalistas, que siguen revirados contra su destino sin admitir su incapacidad para haber cosechado la mayoría suficiente en el Parlamento vasco para seguir gobernando. Y el cambio producido en el Gobierno de Ajuria Enea, con un Ejecutivo socialista apoyado por el PP, es lo que dio al acto de ayer en la Carrera de San Jerónimo el signo de normalidad. Porque también asistió la presidenta del Parlamento». No sé yo si es muy normal que gobierne la izquierda con el apoyo de la derecha. ¿Sucede en algún otro lugar del planeta? No. Porque no es normal.
Como saben que su gobierno tiene pecado original, obvian la cuestión como algo insignificante y tratan, además, de modificar las leyes de la matemática. Por eso evitan las cifras y se refugian en los adjetivos. Etxarri lo intenta: «A los nacionalistas les da igual el número si su sensibilidad no forma parte del Gobierno. De ahí que el jelkide Iñigo Urkullu se permita decir que `los vascos ven con disgusto' la presencia de Patxi López en los actos de la Constitución. Se le ha `caído' de la frase un adjetivo que aclararía a qué tipo de vascos se refiere. Porque se trata de los `vascos nacionalistas'».
O sea, a la mayoría, Tonia, a la mayoría.