La abultada derrota encajada por el San Antonio en la cancha del CAI Aragón (36-25) ha escocido mucho. Davor Dominikovic no quiso poner paños calientes y fue tajante: «Se puede pedir perdón a la afición y al club por un partido en el que hicimos el ridículo, pero no tenemos excusa para la humillación que sufrimos en Zaragoza. No puedo hablar por el equipo, pero yo sentí una enorme vergüenza porque nada funcionó y parecía que nosotros mismos éramos nuestro enemigo, sin ayudas ni juego ni nada».

En ese mismo tono, el croata apuntó que «a partir del minuto 15 ninguna línea funcionó. Alguien de repente apagó las luces y el equipo cambió de mentalidad. Por más vueltas que le estoy dando no encuentro una explicación que justifique ese apagón en la cabeza. No sé si es un problema de preparación física o un tema psicológico pero, cuando parecía que estábamos saliendo de la crisis inicial y lavando un poco la imagen, hemos encajado dos derrotas que han tirado todo el trabajo por la borda».

No luce mejores números el Arrate, antepenúltimo con dos puntos de ventaja sobre el descenso. El próximo sábado, los antonianos reciben al colista Cangas, mientras que los eibarreses juegan en casa con el Torrevieja, que les aventaja en un punto.

Mundial femenino

Tercera jornada del Mundial femenino y ya se están clarificando las tres primeras posiciones que dan el pase a la siguiente ronda. En el grupo A, el más equilibrado hasta ahora, Dinamarca se destaca con Alemania, Suecia, Brasil y Francia por detrás.

En el B, Rusia y Austria comandan la tabla, seguidas por la sorprendente Angola. En el C, Noruega, Rumanía y Hungría tienen enfilada su clasificación, mientras que en el D sucede algo similar con España, Corea del Sur y China.