El informe de Caja Laboral sobre las expectativas económicas de 2010 constata que la tendencia de fuerte destrucción se ha moderado y el próximo año el PIB de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa se situará en el entorno del 0% y en Nafarroa del 0,28% negativo, «con un crecimiento superior al resto del Estado español, que caerá en un 0,6%, según las previsiones actuales», dijo Joseba Madariaga, director del Departamento de Estudios de la entidad financiera.

El director general Elías Atutxa reconoció que se está produciendo una doble velocidad en la salida de la crisis. Unos países, como Estados Unidos, el Estado francés y Alemania empiezan a dar síntomas reales de recuperación, pero al resto le cuesta, aunque la tendencia de caída se ha frenado. «La clave de despegue de la economía vasca se encuentra en retomar la capacidad exportadora hacia los mercados emergentes, que son la llave para avanzar en datos positivos». Atutxa insistió en que el grupo Mondragón es netamente exportador en «un 60% de su actividad», por lo que reconoció que si se utiliza esa fortaleza mejorará, aunque también añadió que se necesita mejorar la productividad.

Sin embargo, la cara amarga de esta nueva etapa se encuentra en el empleo, «que será muy difícil que se recupere», precisó. En este sentido, las perspectivas que detalló Joseba Madariaga indican que «no habrá un deterioro de la tasa de paro, que se situará en 2010 en torno al 11% en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, y del 10,5% en Nafarroa». De esta forma, Caja Laboral no espera que se genere empleo en la economía vasca antes de «bien entrado el año 2011».

Atutxa y Madariaga auguraron que la inflación llegará al 1,2% en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, lo mismo que en el conjunto del estado español, pero se quedará en el 1% en Nafarroa. Un tema que ambos destacaron fue que las medidas fiscales que se adoptarán el próximo año «se han tomado, porque no quedaba más remedio. Los gastos crecen por un efecto automático debido a las diferentes ayudas e inyecciones económicas y la subida impositiva es necesaria», precisó el director del Departamento de Estudios.

Sin embargo, reconoció «que afectará negativamente al consumo, pero esperemos que sea algo temporal».

Elías Atutxa explicó, sin tener datos centrados de Caja Laboral de este ejercicio, que «tendremos menos actividad» y destacó que hasta setiembre «la captación de pasivo ha sido creciente. Hemos crecido en un 1% en inversión y en 4% en la concesión de hipotecarios». remarcó que cerrarán el año con una morosidad del 3,07%, que «será la mitad de la morosidad del sector».

El director general de Caja Laboral indicó que son necesarias las fusiones entre las entidades financieras para «ordenar el sector» y «garantizar estabilidad, que en estos momentos no se ve entre las cajas».