El Gobierno iraní detiene a más opositores y saca a sus fieles a la calle
La situación en Irán sigue siendo tensa, puesto que el Gobierno continúa deteniendo opositores, entre ellos a la hermana de la Nobel de la Paz Shirin Ebadi, mientras que ha hecho llamamientos a sus fieles a que salgan a la calle «para responder ante la conspiración».Laurent MAILLARD |
Las detenciones de opositores, incluida la hermana de la premio Nobel de la Paz Shirin Ebadi, continuaron ayer en Irán después de las grandes manifestaciones antigubernamentales de la Ashura, mientras que las autoridades convocaron contramanifestaciones durante toda la jornada en todo el país.
«La participación masiva de la población en estas concentraciones humillará a quienes han criticado la represión de las manifestaciones», afirmó el presidente Mahmud Ahmadineyad, que calificó la movilización antigubernamental de «guión americano-sionista» y arremetió contra los dirigentes estadounidenses y británicos.
«Van a ver que el pueblo iraní, movilizándose en la calle, les va a deshonrar una vez más. Serán aún más humillados que las precedentes administraciones americana y británica», declaró Ahmadineyad, según la agencia IRNA.
Las autoridades prosiguieron ayer con las detenciones de opositores a Ahmadineyad, centrándose especialmente en periodistas y militantes de derechos humanos, así como en la hermana de Shirin Ebadi.
La premio Nobel, que vive en el exilio y es muy crítica con el Gobierno iraní, consideró que se trata de una medida de presión contra ella. «Mi hermana no tenía ninguna actividad política y su detención es un intento de presión para que abandone mis actividades en defensa de los derechos humanos», declaró en un comunicado.
La web Rahesabz, principal foro de la oposición reformista, anunció siete nuevas detenciones de periodistas, entre quienes se encontraban dos dirigentes de la Asociación de Perio- distas Iraníes Mashallah Shamsolvaezin y Badrolsadat Mofidi.
La Policía también arrestó a la militante por los derechos de la mujer Mansureh Shojaie y a Chapur Kazemi, cuñado del líder opositor Mir Hussein Mussavi, según Rahesabz.
El lunes, las autoridades detuvieron al menos a una quincena de periodistas, defensores de los derechos humanos y personalidades próximas a los dirigentes de la oposición.
Éstos, contra quienes los más altos responsables de la República Islámica pidieron el lunes sanciones judiciales ejemplares, recibieron ayer una nueva advertencia.
El presidente del Parlamento, Alí Lariyani, les instó a separarse del «movimiento pernicioso» que critica la legitimidad de la reelección de Mahmud Ahmadineyad el pasado mes de junio junio y les advirtió de que se abstengan de realizar cualquier crítica en el futuro.
El ayatolah Abas Vaiz Tabasi calificó a los «líderes de la conspiración» de «mohareb o enemigos de Dios» y pidió un castigo adecuado. Este delito está castigado con la pena de muerte por la jurisprudencia de la Sharia que se aplica en Irán.