La Real quiere comenzar el año 2010 como terminó 2009, con una victoria que le permita superar las dudas que genera una semana de parón y aumentar la ventaja al tercero hasta los ocho puntos, tras no pasar del empate ayer todos los rivales directos menos Hércules y Numancia, que ganaron a domicilio.

El campo del Villarreal B no es el más propicio. Se parece más a Zubieta que a cualquiera de los demás de Segunda. No se juega en el Madrigal, sino en el campo principal de la Ciudad Deportiva en el que trabaja y se siente cómodo un filial amarillo que sólo ha perdido en uno de los ocho partidos disputados ante su público. Además ha logrado cuatro triunfos y tres empates.

Es un dato que permite estar alerta porque el Villarreal no es un filial típico. Sólo tiene un jugador de Castellón, Edu, y no está ni convocado. De los catorce jugadores utilizados en el último partido en el campo del Nástic los había de diferentes zonas del Estado y cinco sudamericanos. Y ha contratado a otros dos en este mercado invernal, aunque no fueron convocados ayer.

En un equipo en el que casi todos los titulares tienen menos de 23 años, con un par de excepciones como Cristóbal (25) y Gerard (28), destaca el delantero argentino Marcos Rubén. Lleva nueve goles y el Villarreal pagó por él en enero de 2008 siete millones de dólares al River Plate (4,9 millones de euros) y hasta este verano había jugado cedido en el Recreativo.

Porque se podía escuchar hace unas semanas en ETB a Xabier Azkargorta poner al Villarreal como ejemplo de lo que es fichar barato y vender caro. Pero al margen de que ha pagado más se seis millones de euros por jugadores como Víctor, Palermo, Cani o Llorente y de que su única buena venta de Forlán llegó procedente del Manchester, su cantera está hecha a base de talonario, con fichajes de todo el Estado y de los jóvenes internacionales sudamericanos a los que más proyección ven. Los chavales de su filial cobran más que la mayoría de los jugadores de Segunda. Y por eso se equivocará el que espere un partido sencillo y más en su campo.

La vuelta de Agirretxe al once

Para lograr ganarle Lasarte deberá de introducir un mínimo de dos cambios con respecto al once de las últimas jornadas por las sanciones de Rivas y Bueno. Se espera que Agirretxe recupere su titularidad tras casi dos meses de suplencia y para el puesto de pivote lo más probable es que Aranburu vuelva al once, aunque Lasarte también tiene la opción de dar entrada a Markel para seguir con un jugador de corte más defensivo al lado de Gorka Elustondo.

Para sustituir a los sancionados, Sergio y Viguera entraron en la lista. Es la segunda convocatoria del delantero riojano, al que hasta ahora Martín Lasarte no ha dado ningún minuto.