El nuevo presidente de Radio Televisión Española (RTVE), Alberto Oliart, mostró ayer su confianza en conseguir hacer compatible «una televisión pública de alta calidad sin publicidad» -tal como lo hace desde el 1 de enero- con conseguir «tener una audiencia grande». Las dos cadenas de televisión de TVE se han adentrado en una nueva era sin publicidad comercial.

En una entrevista a la «Cadena Ser», Oliart afirmó que para alcanzar este reto «se necesita el trabajo y la convicción de todos de que un servicio público de esta naturaleza merece el trabajar de una forma especial».

En este sentido, el dirigente del ente público recordó que el nuevo sistema de financiación de la televisión pública es «una idea del Parlamento español, que hay que respetar», pero que también «hay que interpretar».

A su juicio, el objetivo es conseguir «una televisión pública de referencia» y que ésta no debería ser otra que la «calidad». Para ello, Oliart cree que, además de «guardar los mensajes esenciales a los que obliga la ley», la televisión pública debe ofrecer un contenido variado, porque si no «sería muy aburrida».

Preguntado por si deberían suprimir también la publicidad las televisiones públicas locales, Oliart se limitó a señalar que las autonomías «tienen poderes propios muy importantes».

Por otra parte, el recién nombrado presidente de RTVE destacó que cuenta con el equipo de su predecesor, Luis Fernández, al que dijo «hay que rendir tributo y homenaje».