Después de más de 700 días -desde San Mateo de 2008- la pelota profesional regresó ayer al Adarraga de Logroño y de la misma forma que el público acudiendo al frontón en masa, Titín no dejó pasar la oportunidad de responder con una gran actuación con la que consiguieron alzarse a la segunda plaza de la clasificación, a la espera de lo que suceda hoy en Tolosa. Acompañado por un solidísimo Pascual que cuajó su mejor partido del campeonato y el aliento de los suyos, el de Tricio le ganó por completo la tostada a Oinatz Bengoetxea y el de Leitza y Otxandorena -sustituto de Beloki- se complican muy mucho su pase a semifinales tras otra derrota con muy pocos tantos a su favor.

Tras la inesperada derrota del viernes pasado en Getaria ante Olaizola I-Patxi Ruiz, la pareja de Aspe saltó con firme propósito de enmienda y la verdad es que formaron una pareja muy seria ante un Oinatz Bengoetxea que fue diluyéndose y un Iñaki Otxandorena que, a pesar de que se vio dominado por Pascual, se defendió bastante bien.

De esta manera, la igualdad en el marcador apenas duró media docena de tantos, ya que a partir del empate a tres los colorados consiguieron abrir brecha en el marcador. El 6-3, un tanto peleadísimo y en el que los azules demostraron una gran defensa, pero que cayó del lado colorado porque el soberbio sotamano de Oinatz Bengoetxea pegó por encima de la raya de la pared izquierda, supuso el verdadero punto de inflexión, sobre todo moral, ya que aunque los tantos tenían cadencia colorada, resultaban bastante equilibrados y peloteados.

Decide Titín

Sin embargo, a partir del 10-6 emergió el mejor Titín que, apoyado en el dominio que ejercía un Pascual que perdió su primera pelota en el 19-9, fue minando la moral de un Oinatz Bengoetxea desacertado en el remate con toda clase de tantos.

Al margen de tres saques, el pelotari riojano terminó con nueve tantos en su haber -3 de aire, 2 atrás, 2 dos paredes, 1 dejada y 1 al ancho, para deleite de sus aficionados que llenaron el Adarraga en su vuelta a la alta competición. Un parcial de 7-0 a favor de los colorados dejó el partido visto para sentencia, a pesar de los intentos de los azules para mantener vivas sus opciones de pasar a la segunda ronda maquillando el marcador.

Sin embargo, el empeño de los de Asegarce no se vio recompensado, básicamente porque Oinatz Bengoetxea se precipitó en el remate y estuvo errático. En defensa estuvo afinado, pero se precipitó entrando a rematar sin tener el tanto dominado y el nivel de acierto fue bajo. Otxandorena mejoró actuaciones pretéritas, pero estuvo dominado casi todo el tiempo.