La escudería Mercedes se vistió ayer de gala en el Museo que tiene la marca automovilística en Stuttgart para presentar a sus dos pilotos, el heptacampeón mundial Michael Schumacher y Nico Rosberg.

En dicha presentación, los directivos de Mercedes se presentaron como «la selección alemana de la Fórmula Uno» en alusión a la nacionalidad de sus dos pilotos, y también a la de la tradicional marca de automóviles, que espera reeditar la era de los célebres bólidos de plata.

«Ahora tenemos lista la selección alemana de la Fórmula Uno. Un poco de orgullo nacional es legítimo», dijo el presidente del consorcio Daimler, Dieter Zetsche.

La meta de la escudería es clara: el título mundial. Sin embargo, Zetsche prefirió curarse en salud y subrayó que los objetivos a largo plazo no tenían que cumplirse necesariamente en la primera temporada.

«Tenemos un objetivo claramente definido que es ser campeones del mundo pero eso no significa que lo tengamos que alcanzar en el primer año», dijo Zetsche, quien agregó que «somos un equipo nuevo. Dadnos un poco de tiempo».

El monoplaza exhibido ante los medios de comunicación era el mismo de la temporada anterior, pero los presentes pudieron ver cómo será la carrocería de esta campaña. Los nuevos bólidos estarán a punto este domingo, un día antes de que comiencen los test oficiales en Valencia.

Mismo estatus en el equipo

Tras una pausa de varios años y haber insinuado con su vuelta, había muchísima expectación por volver a ver a Michael Schumacher vestido con el mono de competición, aunque esta vez será muy diferente al rojo de Ferrari que le ha dado tantos títulos.

El alemán no quiso defraudar a sus seguidoresy recalcó que «nuestra meta y nuestra misión es ser campeones del mundo».

Schumacher, de 41 años, dijo, interrogado sobre su edad, que no tenía ya necesidad de demostrarle nada a nadie y aseguró que estaba deseoso de volver a competir en un alto nivel.

«Estoy deseoso de volver a competir a alto nivel. Mercedes tiene todos los ingredientes para el título, pero de ahí a cocinar un buen menú hay algo de trabajo», reconoció el piloto.

Ensombrecido por Schumacher, Rosberg afirmó que para él es una gran oportunidad tener a su compatriota como compañero de equipo, aunque dejó bien claro a la revista «Auto Bild Motorsport» que «tenemos el mismo estatus en el equipo».