Ni las críticas ni las peticiones realizadas por la Fiscalía para actuar en contra de EA harán que esta formación «rebaje sus pretensiones, ni ceje en su empeño» para hacer realidad la unidad de acción abertzale. Así de tajante se mostró ayer el secretario general de EA, Pello Urizar, que considera esta apuesta como «valiente y de calado», además de ser, a su juicio, «la única capaz de aportar algo en positivo en el camino de la normalización política y la pacíficación».

El dirigente abertzale abordó en rueda de prensa las críticas a las que se ha visto sometida su formación en las últimas semanas y las achacó al «vértigo y al temor» que genera la posibilidad de que se articule esta unidad de acción. Urizar aseguró que todas ellas «obedecen únicamente al nervisiosismo que produce esta posibilidad», a la vez que anunció que han encargado informes jurídicos para determinar si las críticas vertidas en su contra constituyen un delito de calumnias.

«Lecturas cortoplacistas»

En la comparecencia hubo críticas para todo el arco político, y es que ninguna formación se libra al parecer de haber censurado la opción de crear un polo soberanista. Por un lado, el dirigente de EA considera que los jeltzales sólo buscan la mayoría absoluta de cara a las elecciones del 2011; pero, «no una mayoría que nos lleve hacia el ejercicio del derecho a decidir, si no una mayoría como garantía para no perder más instituciones», denunció el arrasatearra.

Urizar tampoco comprende la postura de Aralar, que «mientras reivindica la unidad electoral para hacer frente a UPN y PSN en Nafarroa, ve sin sentido la misma fórmula para la CAV».

En este sentido, y preguntado sobre la falta de interés mostrada por estas formaciones ante esta apuesta de unión, Urizar tachó de «cortoplacistas e interesadas» las lecturas realizadas al respecto y afirmó que «si no hay voluntad de empezar hacer nada nunca acabaremos con este conflicto».

En este sentido, subrayó el valor de la unidad de acción soberanista, ya que entiende que «puede cambiar el panorama político actual y llevar a este país a la solución del conflicto».

En la comparecencia celebrada en la sede que EA en Donostia, la cual quedó pequeña para acoger a la multitud de medios reunidos, el máximo mandatario del partido consideró que «por encima de las siglas toca hacer país». En este sentido, se mostró convencido de que la aglutinación de fuerzas traerá consigo la «normalización y la solución del conflicto político».

Llamamiento a la serenidad

Recordó que la unidad soberanista tan mencionada en la actualidad es «una aspiración que está vigente en su partido desde hace años» y reiteró que esa apuesta «sigue a día de hoy intacta». Aclaró, en esta línea, que «nadie va a condicionar el futuro» de su formación y mostró su convencimiento de seguir trabajando por la conformación del polo soberanista.

Para ello, Pello Urizar apeló a la «serenidad» al entender que abordar esta vía es una «exigencia» de la sociedad vasca, e invitó a al resto de formaciones políticas a «aclarar sus posiciones y a decir hasta dónde están dispuestos a llegar».

En la rueda de prensa alertó también de que el trabajo en común entre abertzales «va a llevar mucho tiempo», y es que entiende que un conflicto que «lleva cuarenta años no se va solucionar en seis meses».

El dirigente de EA apuntó, además, que cuando la suma de fuerzas sea una realidad «ya se habrá dado un paso definitivo en la resolución del conflicto» y es que, a su parecer, eso significaría que la izquierda abertzale «se habrá desmarcado de la violencia»; condición que calificó de «indispensable» para poner las bases «políticas y pacíficas» sobre la mesa.

Reacción inmediata

El histórico militante independentista Tasio Erkizia también se refirió ayer a las críticas sufridas por EA que, a su entender, buscan «coartar la libertad de expresión y movimiento de los partidos». En una entrevista concedida a ``Info7'', Erkizia opinó que en la formación liderada por Urizar «hay convencimiento y, por lo tanto, músculo político suficiente para hacer frente a las presiones».

Erkizia entiende «estas artimañas» como «un intento de ahogar a las fuerzas políticas que apuestan por la independencia.

El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, por su parte, también salió a la palestra para advertir de que él y su partido «no quieren saber nada de polos soberanistas», ante lo que aseguró que tienen su propio proyecto político. Urkullu no ve con buenos ojos la unidad de acción, ya que considera que la sociedad se debe construir «sin frentismos ni políticas de bloques».

Parecida fue la respuesta de NaBai, que en boca de su parlamentario, Joseba Ezeolaza, aseguró que con las actuales bases políticas «es incompatible una colaboración electoral» entre la coalición navarra y la izquierda abertzale.